Reseñas
La serie principalmente se centra en las interacciones entre dos únicos personajes, Kaede Komura, un chico que está bastante atento a su compañera de clase, y Ai Mie, quien suele usar gafas pero por diferentes motivos suele perderlos, romperlos u olvidarlos en algún sitio.
La mayor parte de los hechos se dan en el salón de clases, en la que se puede ver a ambos en situaciones cómicas sobre cómo, por qué y dónde quedaron las gafas de “Mie-san”. Algo que da paso a momentos de comedia romántica.
Sin embargo, hay algunas variaciones como un juego de quemados en clase de gimnasia, la zona de casilleros de la escuela y una “cita” por la ciudad entre ambos protagonistas. Esto ultimo, abre el camino a varios eventos que pondrán a prueba al corazón de Komura.
La chica que me gusta olvidó sus lentes
El primer capítulo abre con una secuencia netamente original que no se da en el manga creado por Koume Fujichika. Un invento exclusivo del estudio de animación GoHands, el cual trajo cierta controversia en línea por las visuales exageradas. Estas se magnifican al conocer el material de origen, que se caracteriza por ser simple, pero efectivo.
Si se quita eso de lado, se tienen tanto a una Ai Mie que en su primera secuencia aparece con lentes y un rostro que transmite amabilidad. Sin embargo, una escena más tarde, sus lentes ya no están, algo que también permite ver un semblante diferente del personaje, que parece enojada. Aunque solo es ella que fuerza la vista para poder ver mejor. Su rostro más conocido.
A su lado estará, Kaede Komura, que como buen protagonista, se sienta cerca de la ventana. Esa fracción de espacio es lo suficiente para que pueda estar cerca de Mie y ayudarla cada vez que no disponga de sus gafas. Un caso es esa vez que compartieron libro, algo que los acercó a ambos en todo sentido de la palabra.
La segunda mitad del episodio transcurre en los casilleros, en donde Mie se equivocó con sus zapatos y se puso los de Komura por sus descuidos. La cuestión es que no pudo distinguir los propios, pues había una rana dentro de su taquilla. Todo termina en un caballeroso Komura, mismo que será recompensado por parte de Mie, quien recordará su aspecto a partir de ahora.
El tercer y ultimo acto de este capítulo se da nuevamente en el salón, solo que en medio de clases. La salvedad es que Mie se quedó dormida, y es un sagaz Komura quien ayudará para que no sea descubierta por el profesor. Estos esfuerzos serán en vano, pero el protagonista se llevará más que un recuerdo bonito.
En definitiva, uno de los más esperados de la temporada tiene sus pros y sus contras. En lo bueno están los planos en primera persona que abundan en la serie, los cuales son acompañados de una correcta actuación de voces. Kaede Komura es interpretado por Masahiro Ito y Ai Mie por Shion Wakayama.
No obstante, del lado negativo se encuentra una rara dirección visual, con puestas de cámara en lugares extraños. Más para el tipo de género en la que se engloba esta historia. Una mezcla entre animación tradicional para los personajes y animación en 3D o CGI para los fondos. Esta combinación puede ser una excusa válida para omitir a Sukimega.
Es de remarcar, que si se deja eso de lado, queda una comedia romántica con una chica despistada y un chico considerado. Este dúo es el núcleo total de la serie y lo saben explotar muy bien con acercamientos y miradas que sobrepasan el rubor. Una prueba constante para las emociones de un joven que no le puede quitar los ojos a su compañera de clases.
La chica que me gusta me pide salir
El segundo episodio empieza con Komura y Mie como ayudantes en el almuerzo. En resumidas cuentas, mantiene el mismo nivel que el capítulo anterior, solo que en esta ocasión, Mie confunde las porciones de la comida que sirve a los demás estudiantes, donde Komura no es la excepción. El tema es que a este poco le importa.
Un par de sketchs breves se dan a continuación, principalmente tienen a Komura y su promesa de proteger a Mie si se olvida sus lentes. Le sigue otro sobre lentes empañados y uno que desemboca en que haya un intercambio de ID de celular entre ambos protagonistas. En el medio hay un gag que se reitera varias veces, con el vuelo de la psique de Komura representado por un avión.
Estos acontecimientos pasados derivan en una “cita” entre Komura y Mie durante el fin de semana. Dentro pasan algunos hechos de índole romántica, al menos para los ojos de Kaede. Estas van desde el mismo encuentro, darle de comer a Ai y tomarla de la mano. Además de frases que en cualquier otro contexto darían a entender que ya son pareja.
En este punto, y ya pasado lo del primer capítulo, se señala que la animación en 3D se convierte en algo más pasable. Los edificios, paisajes y fondos se mantienen en la misma línea que la vez pasada, con la diferencia que las constantes intercambios entre los personajes principales hacen que medianamente se soporte esta cuestionable estilo visual.
Si de algo no se hizo mucha énfasis es en el apartado sonoro, que no es muy destacable. Simplemente es cumplidor, pero nada más que eso. El par de actores de voz seleccionados son considerados interpretes en ascenso, donde la de más visibilidad es la actriz detrás de Mie por sus papeles protagónicos en “SSSS.Gridman”, “Lycoris Recoill” y “takt.op Destiny”.
En la secuencia de apertura se encuentra “NAME” de Tsuzuri que recicla ese fragmento tan controvertido del primer episodio en mayor medida, con una canción que está en los puestos altos de esta temporada. Ya en el tema de cierre se escucha “Megane Go Round” de Masayoshi ga Megane wo Wasureta, que no es muy inspirada en ningún sentido.