Reseña | Rikei ga Koi ni Ochita no de Shoumei shitemita. – Capítulo 8

[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Rikei ga Koi ni Ochita no de Shoumei shitemita. capítulo ocho contiene spoilers. Si aún no has visto el episodio, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.’]

Prueba 8: Los de ciencias se enamoraron, así que intentaron buscar pruebas de amor

RikeKoi capítulo ocho inicialmente nos trae una ingeniosa resolución para el dilema de investigación de Kousuke, mientras tanto, la investigación de Himuro y Yukimura sigue avanzando y ambos vienen con un nuevo experimento para su recolección de  datos. El campamento a Okinawa se acerca y una nueva cara se une al reparto, Arika Yamamoto es una mangaka que ha puesto toda su atención en nuestros protagonistas y su romántica investigación. ¿Qué situación o desventuras les aguardaran en Okinawa ahora que Arika está determinada a explotar el potencial de este par?

En medio de la genialidad

Si bien esta serie tiene por protagonistas a Himuro y Yukimura, eso no significa que deja de lado al resto de su elenco, en este capítulo me referiré específicamente a Kousuke y Kanade, los dos menores del laboratorio Ikeda. Iniciando con Inukai me gustaría apuntar en las dificultades del promedio en un ambiente de excelencia. Desde su primera aparición, y hasta ahora, Kousuke se nos ha presentado como un personaje diametralmente opuesto a las excentricidades científicas del resto dentro del laboratorio, él es más bien un personaje del tipo otaku, y en cuanto a sus intereses académicos, está igual o más perdido que muchos de nosotros. En muchos sentidos él se siente distante con sus senpais, ya que su interés científico no es tan profundo como el del resto, además de que no se considera especialmente inteligente.

Seguramente el eligió su carrera por su relación con Enna, por mucho que el intente negarlo hay cierta dependencia en su relación. El punto es que no debe ser sencillo lidiar con el sentimiento de “mediocridad” cuando los que te rodean lucen tan comprometidos, la sensación de inferioridad es normal en estos casos. Así como puede hundirlo, Ibarada también puede apoyarlo, la confianza de Kousuke solo debe ser alimentada con apoyo, y ese apoyo es el que Enna le pudo dar, pues ella sabe que él se esfuerza a pesar de sus deficiencias y lo reconoce por ello.

El caso de Kanade es menos severo, después de todo ella pose a su manera un espíritu de científica, quizás lo único que le falta es experiencia. A diferencia de sus senpais, ella no es una loca de las ciencias, sin embargo esta mejor cultivada que Inukai, como dije, lo que ella necesita es experiencia pues como pudimos ver sus presentaciones carecen de mucho. Ya que Kaede es un personaje del tipo que pone mucho esfuerzo, no está especialmente acomplejada o intimidada por el genio de los que la rodean, más bien ella ha generado respeto a ese genio y aspira a alcanzarlo, algo que a Kousuke le falta, la ambición.

Pruebas de amor

Volviendo con Himuro y Yukimura, los experimentos continúan sobre la mesa y ahora es tiempo de medir la oxitocina. Así es, después de ocho capítulos rodeando la ciencia del amor finalmente hace su aparición la hormona que le da “forma”. Esta hormona es llamada la hormona del amor o de la felicidad, se secreta del hipotálamo y es la que nos induce un estado de felicidad y comodidad que tendemos a relacionar con el enamoramiento. La ciencia hace que todo suene menos romántico, en fin, la finalidad de medir esta hormona es agregar más valores a la media del amor, la forma de “liberarla” es a través del contacto físico deseable, así que esperamos una buena dosis de skinship.

De entrada ya hemos visto como Himuro se aferra a Yukimura, tristemente la forma en que se lleva el experimento y la mentalidad implicada daña las muestras pues sin intención ambos crearon un efecto placebo. Será necesario un control más detallado para evitar el placebo, sobretodo en el caso de este par que parece predeterminado a caer en él.

A propósito de la oxitocina, me resulto curioso que no se hiciera mención de uno de sus datos más conocidos, pues resulta que la producción de esta hormona no puede ser tolerada por mucho tiempo en nuestro cuerpo así que podríamos decir que existe una fecha de caducidad en el amor. Después de un determinado periodo de tiempo la sobrecarga química va en descenso, se estima que el periodo en que vivimos sensaciones tan intensas, esas que denominamos como amor, tan solo duran 2 o 3 años, máximo 4. No sé ustedes pero considero que esto es un tema interesante para la investigación de Yukimura y Himuro, después de todo sabemos que hay casos que no respetan esta regla científica, ya que existen os matrimonios que duran hasta 50 años o más.

Yamamoto, ¿amiga o enemiga?

Mientras que sean peras o manzanas, los experimentos deben seguir su camino y la recolección de datos debe ampliarse, y es ahí en donde entra el nuevo personaje, Arika Yamamoto. Ella es una mangaka, no sabemos si buena o mala pues no dio su seudónimo, que actualmente se encuentra en un bache así que regreso a su alma mater para buscar inspiración, y la encontró en Yukimura y Himuro. Sin duda podemos entender el porqué de su interés, son dos científicos que utilizan la ciencia para coquetear entre sí con fines académicos, exactamente la razón por la que nosotros también estamos viendo este anime.

La verdadera cuestión es ¿qué tipo de persona es realmente Yamamoto? Un poco sombreado ya nos va dejando claro que con tal de conseguir sus propósitos ella está dispuesta a jugar sus cartas e ir hasta las últimas consecuencias. Y bueno, yo creo que hay que creerlo, la actitud de Ibarada denota cierto recelo por Yamamoto, lo que solo nos lleva a suponer que no es alguien precisamente inocente. Aunque, también podemos suponer que no es alguien enteramente malvada, si así lo fuera dudo mucho de Ibarada la deje hacer las cosas a su manera, quizá sea Enna la única que pueda enfrentarla realmente. Pero estas son meras suposiciones, el viaje a Okinawa será lo que nos revele las respuestas.

Comentario final

RikeKoi capítulo ocho ha sido un episodio un tanto transitivo, tenemos un par de especulaciones sobre el futuro y una introducción a lo que llamare el arco del viaje a Okinawa (si, lo sé, soy muy original). Lo verdaderamente interesante de este episodio posiblemente cae en dos puntos, la introspección a Kousuke y su sentimiento de inferioridad y la llegada de Yamamoto para mover las aguas. El caso de Kousuke es un asunto sencillo y complejo, hablamos de un sentimiento de inferioridad pero que se ve contrastado con el cariño que siente por sus senpais y el trato que recibe en donde esta y se siente a gusto. Lo de Yamamoto es un poco más complejo y básicamente por eso es un sentimiento más introductorio, su presentación fue el puente de presentación para el futuro viaje a Okinawa que augura estará lleno de diversión, romance y posibles malos entendidos.

En fin, vamos cerrando esto, díganme: ¿Qué les ha parecido este capítulo? ¿Alguna vez han experimentado un sentimiento similar al de Kousuke? ¿Cómo afectara al grupo la adición de Yamamoto al viaje?