Reseñas
[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Fruits Basket capítulo diecinueve contiene spoilers. Si aún no has visto el episodio, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.’]
“¡Lo siento mucho!”
Un nuevo horóscopo hace su aparición, se trata de Ritsu Souma el mono del zodiaco. Y a pesar de su bella apariencia y su bellamente vestido kimono, Ritsu es en realidad un hombre. Él es alguien con un fuerte problema de confianza, así que siempre se está disculpando, pero a pesar de todo tiene un noble deseo de cambiar. A pesar de sus constantes metidas de pata, Tooru le hace ver que lo maravilloso de vivir es buscar un propósito por el que estamos aquí. Gracias a estas palabras y a su nueva amistad con Mit-chan, Ritsu sigue adelante con su búsqueda de su propósito.
Una vida con propósito
En esta ocasión, Fruits Basket capítulo diecinueve nos presenta uno de los problemas que más aquejan al ser humano: encontrar un propósito para nuestra vida. Para unos, más que para otros, la interrogante del porqué nacimos es una carga muy pesada que se lleva a cuestas. El caso de Ritsu es muy peculiar, ya que él al no poseer alguna característica que lo destaque ha crecido con un sentimiento de inferioridad muy fuerte, sentimiento que solo se ha ido agrandando al siempre observar como sus padres se disculpaban por sus carencias o torpezas, esto solo ha incrementado sus inseguridades hasta transformarlo en alguien incapaz de encontrar razones para su existencia.
Sin embargo, y como suele ocurrir en realidad, el hecho de no encontrar un propósito para nuestra vida no es lo suficientemente determinante como para acabar con ella. A pesar del intento de terminar con su vida, Ritsu confiesa su incapacidad para cometer tal acto, pero eso es algo que Tooru agradece. Quitarse la vida requiere valor, pero es un valor que no necesitamos, no ante estas circunstancias. Si tu mayor pena es no encontrar un propósito para tu vida, en lugar de tener el valor para acabar con ella, es mejor armarse de valor para enfrentarla y buscar ese propósito.
Nadie nace sabiendo porque está aquí, e incluso nadie puede tener una verdadera certeza de que ha cumplido o encontrado su propósito en la vida. Pero esto no es algo que deba desalentarnos, sino todo lo contrario debe ser un motor para seguir persiguiendo nuestros propósitos. A final de cuentas una vida con propósito es una que se vive siempre experimentando, aprendiendo y aceptado. No se trata de someterse al fatum, pero si saber aceptar que algunas cosas son como son… ‘que será, será’.
Vivir por alguien
La vida es un misterio en todas sus formas, la razón de nuestra existencia es quizá el mayor misterio que encierra. Vivir requiere propósito, se imaginan una vida a la deriva en donde solo se dejen arrastrar por los vaivenes de la existencia, eso sería completamente antinatural. Los seres humanos formamos vínculos, es por ello que no es extraño que creemos nuestro propósito en la vida en torno a alguien. Pero, ¿qué significa vivir por alguien? En suma es dedicar tu existencia a esa persona, pero cuidado aquí, dedicarle tu existencia a alguien no cancela el amor propio. Muchas veces se cree que ‘vivir para alguien’ deriva en un descuido de tu persona en pos de la otra, pero ese no es el caso en absoluto, ya que vivir por alguien significa que también debes cuidarte por ese alguien, puesto que tu vida ya no es solo tuya.
Es posible que crean que encontrar tu propósito en alguien más es volverse dependiente, eso es un error. Existe una abismal diferencia entre ‘vivir POR alguien’ y ‘vivir PARA alguien’, la dependencia surge ante esta segunda acción, la primera es un cuidadoso camino para el crecimiento personal y el de tu persona elegida. Así que no teman querer hallar su propósito en alguien más, mientras sea en pos del crecimiento mutuo será un propósito maravilloso por el cual vivir. Sean como Ritsu y Mitchan, anhelen por su crecimiento, por el apoyo que solo otra persona puede brindarnos, anhelen por el deseo de necesitar y ser necesitado. Recuerdan el subtítulo anterior, pues lo punteo… cuando comiencen a vivir con estos planes en mente, entonces estarán viviendo una vida con verdadero propósito. Todo tiene su tiempo y cuando menos lo esperen estarán en el sitio correcto, en donde siempre anhelaron estar.
Comentario final
Fruits Basket capítulo diecinueve ha sido un episodio bellamente reflexivo acerca de la vida y nuestros propósitos en ella. También es un buen vistazo al inicio de un amor verdadero, uno que no presiona que espera y es paciente, que se preocupa y se ocupa, es el amor que nace de vivir por alguien. Sin duda este capítulo estuvo cargado de reflexión, además de la usual comedia. Como es usual también cargo con algunos guiños a futuros arcos de la historia, el más notable es la pequeña mina que casi pisa Tooru al recordar a su madre, y su sutil pensamiento de incertidumbre ante la pérdida de tu propósito, o quien tu creías era tu propósito.
En fin, antes de cerrar con esto tengo que decirles que este es el episodio que más cambios ha tenido hasta el momento. Para empezar en el manga esta historia ocurre más adelante, sumado a ello aquí no pudimos observar a Ritsu en ropa masculina tampoco lo vimos usar sus habilidades acrobáticas al casi caer del techo. Pero sin duda el cambio más grande fue el protagonismo de Mitchan, aquí se le otorgo un buen foco, lo suficientemente bueno para que el shippeo de Mitchan x Ritsu este de pie. Yo no me quejo, a decir verdad el resultado final de este episodio para mi gusto ha sido genial, tan solo hubiera deseado que no omitieran ‘el remedio de la abuelita para detener a Ritsu’.
Finalmente los dejo con mis preguntas de siempre: ¿Qué les ha parecido este episodio? ¿Puede alguien vivir sin un propósito? ¿Shippeo masivo de Ritsu x Mitchan o qué? ¿Creen que ustedes podrían vivir disculpándose por todo?