Reseñas
[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Yesterday wo Utatte capítulos seis y sietes contiene spoilers. Si aún no los has visto, te recomiendo que vayas a checarlos y después regreses a leer la reseña.’]
Yesterday wo Utatte
Capítulo 5: Una joven llamada Yuzuhara
Yesterday wo Utatte ha continuado con el ritmo del capítulo cinco insertando otro personaje pasajero. Estos personajes que van y vienen sin duda han dejado mucho en qué pensar. Nuestra nueva pasajera en este drama es Yuzuhara, una ex novia de Rikou. En desafortunados hechos él ha tenido que alojarla en su casa dándonos a nosotros un gran tema de conversación. No hay nada entre ellos más que los recuerdos vagos de la preparatoria, aún así esto no impide que su presencia le traiga problemas a Rikuo. Un resfriado lleva Shinako y Haru a casa Rikou, ambas enfurecen por encontrar a una nueva intrusa a lado de él. Al parecer Shinako toma conciencia de lo que siente por Rikou, ¿podrá seguir adelante?
Capítulo siete: Una premonición de enamorados
No hay nada que disfrute más que la toma de decisiones. En este último episodio me ha dejado con la poca abierta y sumamente ansiosa para la próxima entrega. Shinako parece despertar, no puede seguir huyendo de lo que siente y menos de vivir. Rou es un muchacho que sabe lo que quiere al igual que Haru, pero eso que desean no les corresponde. No perder las convicciones le da fuerza para luchar por aquello que se les resiste. Esta determinación ha llegado a Shinako. La charla entre Rikou y su amigo deja claro que en Yesterday wo Utatte quieren hacernos creer que el rumbo de la vida sí está determinado por lo que deseamos. La boda y los acercamientos entre este par cada vez hacen evidente que sólo necesitan un empujón.
Soy un parásito
Yuzuhara llegó para mostrarnos qué es el egoísmo. Comúnmente usamos esta palabra de modo despectivo, como un adjetivo calificativo malvado, esta etiqueta es inevitable para cualquier ser humano. El origen de los actos egoístas es incierto para cada hombre. Unas veces es el enamoramiento, otras la supervivencia, otras el correr en círculos, todo esto surge del deseo. Desear a alguien, desear vivir, desear un recuerdo, al final son clases de deseo que determinan nuestros actos, al menos así lo pensó Shopenhauer. Cualquiera estaría de acuerdo si esto sonara igual de bello al decir que al mismo tiempo que deseamos solemos usar a los demás.
Soy un parásito fueron las palabras que usó Yuzuhara que explicar su presencia en la casa de Rikou. Ella lo había buscado para refugiarse un tiempo. Su oscura historia revelaba que ella lo había botado en preparatoria. La razón no fue la que él creyó, ella sólo quería estar con alguien más. Admirar el desastre que había causado entre Shinako y Rikou, Yuzuhara decide marcharse dejando una nota bastante fría. Así es, se sirvió de Rikou, pero se marchó para no causarle más malos entendidos. Estamos acostumbrados a creer que los actos de los demás tienen alguna relación necesaria con nosotros. Llamamos a los egoístas sin saber nada de ellos, de sus razones o deseos. Solemos creer que usamos a los demás sólo porque no sabemos a dónde vamos.
Shinako fue la más afectado por esta imprevista visita. Se ha hecho evidente que de alguna forma tiene nobles sentimientos por Rikou. Sus celos nos demostraron que ella realmente lo está esperando. Piensa ser egoísta por atarlo a ella sin tener nada que darle. Su equivocación la entorpece al actuar. El egoísmo, en efecto existe, pero su connotación no es necesariamente mala. Desear no es todo lo que nos controla, los actos humanos están determinados por los deseo pero también por esta parte racional que nos dicta lo bueno y lo malo. Nadie puede librarse de este yugo, pero podemos facilitarnos la vida siendo sinceros y honestos con nosotros mismos. Tal tarea no es siempre sencilla, pero sí satisfactoria.
¿Quieres pasar?
Esta pregunta fue la línea final de Shinako al terminar el capítulo siete. El contexto es fácil de explicar. Ella realmente terminó conmocionada por Yuzuhara. Todo este capítulo está repleto de argumentos sobre el decidirse a actuar. Tomar decisiones es algo que solemos pensar como determinado o condicionado. Rikou ha estado esperando a aprender más sobre fotografía para compara una buena cámara, no se ha dado cuenta de que comprar la cámara lo pone un paso más cerca para ser un fotógrafo. Esta última parte es a la que quiero prestar atención.
Saber a dónde vamos nos da luz sobre lo que necesitamos hacer para lograr llegar ahí. Está claro que si no sabemos nuestra meta, tomar decisiones que nos pongan cerca de ella es difícil. Puede ser el caso que aún teniendo vagos deseos, aún teniendo claro a dónde queremos llegar, no tomemos las decisiones pertinentes. Las razones para actuar de este último modo pueden ser variables. En Rikou es inseguridad e indecisión, en Shinako es miedo. Ella lo ha admitido, sus intentos por escapar de los demás para refugiarse en el recuerdo de su difunto amado son sólo pretextos para esconder lo que siente.
Cuando lo que sentimos sobrepasa las circunstancias, parece que éstas nos han acorralado y que la única escapatoria es dejar a un lado las inseguridades y miedos para decidir vivir. La última lección que nos dio Shinako es memorable. Tomar la iniciativa nos demuestra a nosotros mismos que vagar no es más que una condición personal. Dejar ir es un paso que nadie puede dar por nosotros mismos. Dudo mucho que exista algo en esta vida de lo que no seamos responsables sólo nosotros. Cuando tenemos claro esto último la vida es más simple y dichosa.
Conclusiones finales de Yesterday wo Utatte
Estos dos últimos capítulos de Yesterday wo Utatte nos han dado lecciones importantes. No es un anime muy llamativo lo he dicho en repetidas ocasiones, sin embargo, su forma de argumentar y sus argumentos mismos, no han dejado de darnos bastante material para reflexionar sobre lo que significa la vida adulta. Todos los problemas desarrollados en esta historia están relacionados con la madurez. Crecer no es un proceso placentero, estar conscientes de lo que queremos ser y a dónde vamos para lograrlos se dice fácil, pero en realidad es agotador y abrumador. Nosotros que somos una generación con altas disposiciones no hemos aprendido claramente sobre la vida adulta.
La serie comienza a tomar forma y sin lugar a dudas he terminado de poner mi fe en ella. Estamos justo a la mitad y lo que esperamos para el final puede ser inolvidable. Seguir la pista de este anime nos dará luz sobre lo que viene, así que la invitación a seguir al pendiente de este anime sigue abierta, ahora más que nunca. Este anime me ha demostrado que toda historia puede dar giros inesperados aún cuando sea lineal y predecible. Tomen decisiones, si son buenas o malas está de más, lo que importante es aprender a hacerse responsables de ellas. Espero sus opiniones como en cada reseña.