Reseñas
[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Fruits Basket 2 capítulo diez contiene spoilers. Si aún no has visto el episodio, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.’]
“¿Quién eres tú?”
Fruits Basket 2 capítulo diez inicia con todos planeando la última actividad del viaje a la playa, lanzar fuegos artificiales. Kyou reflexiona en porque todos anteponen a Akito sobre Tooru, pero Momiji le hace ver que no es algo noble sino solo egoísmo. Por su parte, Akito continua irritándose por el trato que recibe se Shigure. Cuando le piden volver a la mansión principal decide hacerle una visita a Tooru para dejar las cosas claras. El encuentro entre Akito y Tooru revela que los planes para los zodiacos no son dulces, y distinto a lo que planeo esto solo hace que Tooru tome una resolución, ella romperá la maldición de los Souma. Finalmente el viaje ha llegado a su final, disfrutando los fuegos artificiales y planeando hacia el futuro.
“No es algo tan noble…”
La semana pasada tuvimos un duro golpe al corazón cuando Kyou se enfrentó a sus sentimientos, y ante la perspectiva de que Tooru saliera herida por su culpa, tomo la decisión de tragarse sus propios sentimientos. Esa resolución es lo que le ha llevado a procesar la actual situación, él no es el único que está tratando de cuidar de Tooru. A pesar de que Tooru ocupa un lugar más importante que Akito en el corazón de los jóvenes del zodiaco, estos no pueden desobedecer el ir a verle. Porque eso significaría poner a Tooru en peligro por los celos de Akito. Era algo obvio pero Kyou no lo pudo entender, no hasta que se le puso en la posición de verlo por él mismo.
Cuando Kyou le dice esto a Momiji, este le dice que no se trata de algo tan noble, pues hay egoísmo en sus acciones. Ya que si realmente quisieran protegerla desde un inicio nunca la hubieran involucrado en todo esto. El deseo de querer estar más tiempo con Tooru, desear crear recuerdos con ella es algo egoísta. Esto es porque en el fondo entienden que ella no se vería involucrada sino fuera por esos deseos de estar a su lado. Kyou también puede entender esto, él mismo sabe que es lo que está haciendo. Sin preocuparse por el dolor futuro, quiere disfrutar de un presente donde ella este ahí.
Ahora bien, si me lo preguntaran a mí, diría que esto no es algo necesariamente egoísta. El deseo de permanecer a lado de quien nos importa no es algo que pueda simplemente suprimirse. Además el hecho que la involucrada se siente de la misma manera libera mucha carga de ese “egoísmo”.
El papel de Akito
Algo que este capítulo nos permitió es conocer más de Akito y sus motivaciones. Antes ya había hablado de la personalidad de Akito, además de lo ya dicho creo podemos añadirle un severo complejo de inferioridad. En efecto dije de inferioridad no de superioridad. A pesar de que lo obvio apunta a que se siente superior a todos, si somos más detallistas podemos notar que sus palabras constantemente apuntan a que tiene un profundo miedo a que otros le vean con empatía. Algo propio de la empatía es que nos permite ponernos al nivel de otro. Eso es algo que Akito no puede tolerar, no porque se sienta irremediablemente superior a otros sino porque tiene miedo de revelar que no lo está. Tiene miedo de enfrentar la debilidad.
En este punto no es del todo claro, pero Akito carga con mucho peso, hay situaciones sucediendo en su vida que le hacen muy vulnerable, ya que no sabe lidiar con ello. A penas mencionada por Shigure, Ren es una existencia con la que Akito no puede tratar. Que sea precisamente Shigure quien la mencione no es algo gratuito. Creo que en este punto para todos es evidente que la relación de Shigure y Akito es más profunda de lo que aparenta, y por ello no debe sorprenderlos que Akito exija amabilidad de Shigure, una amabilidad que este no le puede dar, pues no está en su naturaleza. La camelia que pudimos observar por un momento es una parte fundamental de todo este drama. Y aunque quisiera decir más, no puedo pues sería un tremendo spoiler.
Lo que sí puedo decir es, Akito ha sido revelado como Dios, lo que significa que tiene un control y un lazo muy especial con los horóscopos. Pero no olviden que la maldición no es propia de los animales, también es algo con lo que “Dios” debe lidiar, aunque será de una manera muy distinta comparada con el resto de los horóscopos.
La resolución de Tooru
Lo más impactante de este episodio fue el enfrentamiento de Akito con Tooru, llevada por su sentimiento de protección Tooru intervino en el momento justo para evitar que Akito se siguiera desquitando con Momiji. Las consecuencias de esto fueron que acabo enterándose del triste destino que Akito desea marcar para los horóscopos, el encierro de Kyou y el futuro regreso de todos al estado Souma. Para Akito estas cosas son normales, son lo esperado, es parte de su felicidad, pero para Tooru es impensable.
Es verdad que nadie debería juzgar los deseos de otros, no sabemos lo que se necesita sacrificar para llegar a esos anhelos, sin embargo es justo poner trabas cuando estos deseos no se corresponden con el anhelo de todos. Para Tooru, los ideales de Akito no se corresponden con los cambios que ha visto en sus amigos y en sus cercanos, ella no puede aceptar ese “destino”. Por primera vez ha entendido el peso real de la maldición Souma, se trata de una pesada cadena que los ata y les arrebata su libertad.
La decisión de Tooru ha marcado el verdadero punto de inflexión de este arco, es tiempo de pensar en romper esta maldición. Queridos lectores, esta historia apenas ha comenzado a alcanzar sus verdaderos cimientos. La idea de Akito de arruinar las falsas ilusiones de todos, acabo completamente volteada, finalmente fue esta desagradable visita la que despertó la determinación de todos. Yuki y Kyou han comenzado a encarar sus sentimientos, los demás se han vuelto muy conscientes del peso de sus elecciones y tratan de proteger su “libertad” de la mejor manera que pueden, pero la verdadera revolución llego con Tooru, ella ha tomado la resolución de acabar con todo el dolor desde la raíz.
Comentario final
Fruits Basket 2 capítulo diez, ha sido un episodio revolucionario. Después de tantas revelaciones y momentos de tensión, el momento de inflexión más grande para esta historia ha llegado, a partir de aquí todo cambiara. Este ha sido un viaje que ha cambiado a todos de alguna manera, les ha puesto en perspectiva muchas cosas y les ha hecho comprender y encarar sus debilidades. Es justo decir que las mayores catarsis han sido para Yuki y Kyou, y aunque Tooru no se queda atrás, ella creció en resolución más que en un enfrentamiento hacia sus propios problemas, los cuales ya vislumbramos pero aún están lejos de ser encarados.
Antes de cerrar con esto les diré que estoy muy enamorada de las expresiones de los personajes, me resulta muy gratificante ver tantas emociones impresas en sus rostros. Finalmente se ha terminado el arco del viaje a la playa y justo como lo prometieron ha estado lleno de drama, emoción y mucho amor. Este arco ha sido maravilloso por el peso argumental que posee, además debo agregar que resulto en algo muchísimo mejor de lo que me había imaginado.
En fin, esta ha sido mi impresión de este capítulo, díganme: ¿Qué les ha parecido este episodio? ¿Cuál ha sido su momento favorito? ¿Creen que pueda existir un amor que esté libre de egoísmo? El próximo capítulo tendremos el regreso de Kagura y les aseguro que más de uno derramaran lágrimas.