Reseñas
[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Banana Fish capítulo trece contiene spoilers. Si aún no has visto el capítulo, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.’]
#13 The Snows of Kilimanjaro
Antes de partir al encuentro con Arthur, Ash se encarga de dejar instrucciones para sacar a Eiji del país. El momento ha llegado, Cain estará presente como testigo, pero no será el único. El duelo uno a uno inicia sin contratiempos, pero Arthur no tarda en sacar su “carta de triunfo”. Aunque poco le dura el gusto, ya que Sing y Cain pelean de lado de Ash. Logra escapar pero Ash también ha abordado el tren. Mientras tanto, Eiji despierta solo para descubrir que Ash se ha ido y él debe regresar a Japón. La persecución de Ash continua, pero estando en esa situación no puede evitar recordar la plática que tuvo con Eiji acerca de la muerte. Eiji acaba enterándose de la verdad de donde esta Ash y escapa para ir a buscarlo. Ash finalmente ha alcanzado a Arthur y la pelea final será en Coney Island.
Mientras Ash y Arthur pelean, varios chicos llegan a la escena; entre ellos Eiji. Pese a lo desfavorable de la situación, Ash consigue darle el golpe final a Arthur y acabar con él. Mientras todos lo vitorean él solo quiere que Eiji no lo vea así. Al final la policía llega al lugar y se lleva a Ash y al resto.
Duelo a muerte con cuchillos… y un tren
Finalmente el momento de ajustar cuentas ha llegado. El esperado duelo entre Ash y Arthur se determinara en un enfrentamiento con arma blanca. Como una manera de hacer las cosas “neutrales”, ambos se encontraban fuera de sus respectivos territorios. La estación East Broadway seria el escenario perfecto para saldar viejas cuentas. Aprovechando las construcciones de la línea F, la estación estaría cerrada y nadie podría interrumpir. A menos, claro, que ya hubiese alguien adentro. El joven líder de los chinos, Sing, no está dispuesto a que se le deje fuera. Con la zona del centro en disputa, no es de extrañar que tenga interés en el asunto. Pero eso no es todo, Sing aún tiene asuntos pendientes con Ash, pero eso será para otra ocasión. Las reglas han sido marcadas, será un duelo uno a uno y solo se permite usar cuchillos. (No es que Arthur pueda usar otra cosa)
Apenas iniciado el duelo, Arthur enseña el cobre. Como era evidente, todo se trataba de una trampa. Habiéndose echo de un tren, el grupo de Arthur arribó a la estación y comenzaron a abrir fuego. Sing fue el primero en actuar y sin pensarlo le regreso su pistola a Ash, ahora no estaría indefenso. Los hombres de Sing no tardaron en aparecer y Cain se unió a la pelea también. Ante la cobardía no hay mejor arma que el honor, Ash es alguien que se gana el respeto, y por ende, que las personas lo sigan. Esto es algo que Arthur no conoce y por ello no esperaba que aparecieran refuerzos para el rubio. Nuevamente demuestra su cobardía al intentar huir en el tren. Demostró su poca capacidad de planeación cuando lo toma por sorpresa saber que Ash le siguió dentro del tren. ¿Neta no lo vio venir?
¿Vivir en mundos diferentes significa no poder cruzarlos?
Hay un personaje que ha tenido un crecimiento muy acelerado, comparado con el resto. Me refiero a Eiji, ojo, que sea acelerado no quiere decir que no esté bien fundamentado. Y es porque la fuerza de las circunstancias, le ha orillado a una rápida aceptación de las cosas. Inesperadamente se ha visto envuelto en un mundo que dista mucho del suyo. Hay tanto que desconoce, y al mismo tiempo no quiere conocer. Si hay algo evidente, es que Ei-chan no desea volverse un pandillero. Lo que él desea es ayudar a un amigo, que resulta estar inmerso en ese mundo. El trato con Ash le deja en claro que han vivido en mundos muy distintos, lo entiende, pero también entiende que ahora está en su mundo. No importa como haya sido, la realidad es esa, Eiji ya es parte del mundo de Ash y viceversa.
Pero es preciso volver a mencionar esto, Eiji está abierto a aceptar todo. Eso incluye tener que dejar a Ash, si este así lo desea. Sin importar cuanta estima sienta por el rubio, Eiji no quiere imponerle sus sentimientos, pues sabe que Ash ya carga con mucho. Tanto lo sabe, que es hasta doloso para él. Y la carga es mayor pues se sabe incapaz de ayudarlo. Nosotros sabemos que Eiji es un consuelo para Ash, pero él NO lo sabe. Parece mentira pero es la realidad, Ei-chan NO es consiente del peso que su existencia tiene para Ash. Pero todo esto es natural, después de todo Ash conserva una fachada de chico rudo. Fachada que Eiji ya ha visto desmoronarse, lo ha visto siendo un niño, siendo frágil, buscando consuelo. Y pese a ello no termina de encajar todo el rompecabezas que Ash Lynx supone. “¿Cuál es el verdadero?”
“Nunca lo pediste, pero es por eso que te odio aún más”
¿De dónde viene todo el odio que Arthur siente por Ash? Esta es la interrogante que más dudas ha generado, incluso ya han nacido un par de teorías al respecto. Sin embargo, y pese a lo elaboradas que son algunas, ninguna calza con la simpleza de la verdad. Porque si, la razón del odio de Arthur es algo sumamente simple. Pero cuidado, la razón es simple de decir, pero es compleja de expresar. Hay sentimientos que nos consumen por dentro, que pueden sacar lo peor de nosotros. La envidia es un gran ejemplo de ello. Es un sentimiento venenoso que antes de siquiera notarlo ya se ha apropiado de todo nuestro ser. Lo más peligroso de este sentimiento no es la velocidad con la que crece, si no los amigos que invita a invadir nuestra alma. Porque la envidia sola no puede consumir un alma.
Las palabras de Arthur revelan todo y nada, no revelan nada para quienes nunca han sentido el ardor de la envidia. En cambio lo revelan todo para quienes lo han llegado a experimentar. Arthur no sabe nada de Ash, conoce su pasado pero eso no significa conocerlo a él. Sin embargo, él siente que al conocer ese pasado puede identificarse, incluso puede estar sobre él. La envidia solo nace del reconocimiento de una desproporción de habilidades. Para que la envidia de Arthur naciera, antes tuvo que admirar a Ash, y de hecho lo hizo, al grado de querer destruirlo. El mocoso que admiraba, lo derroto y lo marco de por vida. El odio nació, no por lo que le hizo, sino por las expectativas que sabe alguna vez tuvo sobre él. El verdadero síndrome de Amadeus está en Arthur con Ash, deseaba desesperadamente el don que el otro nunca pidió.
Solo tú
Antes les había mencionado la aceptación del fatum que Ash representa, eso no ha cambiado o eso se esperaría. Sin embargo la realidad es muy distinta, nuestro rubio empieza a cuestionarse el destino que parece tener marcado. Y todo es gracias a la adición de Eiji a su vida. A su lado puede ser normal, se siente cómodo y libre. El lince que siempre está en busca de libertad encontró algo que es parecido a esta. Pero no es estúpido sabe que se trata de una libertad efímera. Ash se culpa de muchas cosas, él mismo no sabe quién es en realidad. Esta culpa es tan profunda que se cree inmerecedor de cariño o consuelo. Y es justo eso lo que Eiji busca ofrecerle, cariño y consuelo. Tiene lo que desea pero no puede aferrarse a ello. ¿Recuerdan sus palabras? “No te pido que sea por siempre, solo por ahora”.
Lynx sabe y acepta que llegara un día en que Eiji lo dejara, lo tiene asumido, aun así quiere permanecer como un buen recuerdo para él, o al menos uno no tan malo. Su decisión de dejar ir a Eiji siempre fue pensando en lo mejor para el japonés. Nunca se detuvo a pensar en lo que este quería. No podía hacerlo, estaba inmerso en su propio sentir: no herir a Ei-chan. En el tiempo que pasaron juntos, le enseño muchas facetas suyas. Pero aun había mucho que le oculto. Porque está obsesionado con la idea de que ambos pertenecen a mundos distintos. Entre menos viera Eiji del mundo de las pandillas y la mafia, más podía pretender que pertenecían al mismo mundo. Es por eso que solo Eiji no debía verlo así, solo él no debía estar ahí. Pero Ash parece haber olvidado que Ei-chan ya conocía ese lado suyo, y pese a ello nunca huyo de él.
Las nieves del Kilimanjaro
Por segunda ocasión tenemos una referencia directa del título dentro del capítulo. The Snows of Kilimanjaro es un cuento escrito por Ernest Hemingway, y tal como las palabras de Ash anuncian, es una historia de mira a la muerte. Las nieves del Kilimanjaro, narra la historia de Harry y Helen, quienes se encuentran varados y esperando ayuda en las montañas de Kilimanjaro en África. Con la pierna gangrenada, Harry se encuentra a las puertas de la muerte, pero es Helen quien le anima a no darse por vencido. La historia sigue esa línea todo el tiempo, hasta el deceso de Harry. Cuento aparte, es evidente que la importancia de este cuento en el episodio es en relación al inicio. Pues tal y como lo narra Ash, la historia inicia con la incógnita de como un leopardo llego al Kilimanjaro. Incógnita que Ash no duda en transpolar a su propia vida.
Al pensar en su propia muerte, Ash no puede evitar recordar este cuento, pero ¿por qué? ¿qué lo hace tan especial? Sencillamente es la imagen incompleta lo que lo hace tan atractivo para Ash. El leopardo se encuentra en la cima del Kilimanjaro, pero nadie sabe cómo llego ahí o que intenciones tenia. ¿Se perdió al seguir una presa, o siempre fue su deseo llegar ahí? ¿Tenía intención de seguir subiendo o quizá intento regresar? No hay respuesta para ello, pero Ash se interesa en obtenerla porque se compara con ese leopardo. El camino que ha transitado ¿es correcto o quizá siempre estuvo a merced del destino? ¿Puede volver o debe seguir adelante? Sin una respuesta clara, cada vez va más de frente hacia “La casa de Dios”, tal como el leopardo que tanto le obsesiona. No es la muerte sino el destino lo que le inquieta.
Comentario final
Mi corazón nunca parece estar preparado para un nuevo capítulo. La pena y el dolor cada vez pegan con más fuerza. ¿Me arrepiento de seguir este anime con ustedes? Ciertamente no, es lo verdaderamente humano de esta serie lo que me hace volver por más. El análisis esta vez quizá lo sientan más pesado, perdón por eso, me emocione sacando todo mi sentir. Había tanto que quería decir y a la vez me parecía tan innecesario agregar. Después de este episodio muchas cosas van a cambiar. Sí, eso incluye el opening y ending, que por cierto ya se rumorea serán igual o más rompecorazones que los actuales.
No quise extender un análisis solo de esto, pero ¿puedes amar y odiar a un personaje? Yo diría que sí, Arthur es mi prueba de ello. Antes de que me salten a la yugular, les explicare el porqué. Frederick es un maldito en toda la extensión de la palabra, había demasiada saña en su actuar. Sin embargo no había maldad, de nuevo ¡calma! ya me explico, los actos de Arthur podrían parecer malvados, pero no lo eran, solo se trataba de un niño reclamando atención. No la de Golzine, sino la de Ash. Lo odio por el sufrimiento que causo con sus acciones, pero lo amo por ser un verdadero villano hasta el final. Es por estas cosas que Banana Fish no es un Shounen, no hay evangelización mágica final. Arthur fue un villano de inicio a fin, nunca se arrepintió de sus acciones y eso hace que la secuencia de su muerte fuera lo mejor del episodio.
Ya no me extiendo más, solo les dejo esto último: ¿Estará bien Ash? ¿Todos acabaran en prisión? ¿Qué pasara con Eiji y Ash ahora? ¿Alguien sabe de algún pegamento para reparar mi roto corazón?