Reseña | Kimetsu no Yaiba 鬼滅の刃 – Capítulo 23

[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Kimetsu no Yaiba capítulo veintitrés contiene spoilers. Si aún no has visto el episodio, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.’]

Episodio 23: Reunión de los Pilares

Esta semana Kimetsu no Yaiba capítulo veintitrés inicia justo donde concluye el anterior. Sanemi intenta sacar los instintos de demonio de Nezuko usando su propia sangre. Sin embargo sus intentos resultan infructíferos pues la menor de los Kamado sigue bajo la conciencia de que nunca debe dañar a ningún humano puesto que son familia. Demostrado con esto que Nezuko y Tanjiro son aceptados para continuar su viaje juntos. Pero esto implica que Tanjiro deberá esforzarse aún más por acabar con otros demonios y con Kibutsuji. Con lo anterior zanjado, Shinobu ofrece su finca para que los Kamado reposen y ellos continúen con su reunión. En medio de empujones e impertinencias Tanjiro abandona la finca del ‘patrón’ y llega a casa de Shinobu donde se reencuentra con Zenitsu e Inosuke. ‘El patrón’ y los demás pilares continúan con su reunión, las cosas comienzan a moverse.

La respuesta de Nezuko

Después de una semana en el limbo finalmente pudimos ver el episodio y conocer la reacción de Nezuko ante el ataque de Sanemi. Quiero creer que para nadie fue una sorpresa que Nezuko se negara a atacar al Pilar del viento. Anteriormente se buscó dejar en claro que durante su ‘coma’ de dos años, Urokodaki sugestiono a la menor de los Kamado para que esta no atacara humanos, que luchara por ellos como si se tratase de proteger a su familia. En su momento yo apunte lo acertado de esta elección, pero también externe cierta duda sobre su funcionamiento a futuro y ante una situación límite.

Pues bien, podríamos decir que llegamos a esta ‘situación límite’. Nezuko fue probada en su resistencia al casi obligarla a despertar sus instintos como demonio. Porque en efecto la situación se pintó de esa manera, Nezuko estaba herida y se le estaba ofreciendo sangre, el fluido que necesita para reponerse de los daños sufridos.

Pero aun con todas las cartas sobre la mesa, Nezuko no cayó en la tentación. Recordó a su familia y que es su deber protegerla y la manera de hacerlo es no herir a ningún ser humano. La respuesta de Nezuko fue evidente desde el principio y sin duda eso es un gran alivio para todos, ya que significa que permanecerá a lado de su querido hermano. Y bueno, gracias a esta elección tuvimos dos grandes momentos para rememorar: las memorias familiares de Nezuko y su encantadora forma chibi haciendo pucheros por el trato de Sanemi. Puedo decir con confianza que ha sido un excelente botín, tuvimos un hermoso momento emotivo que se aligera con el usual toque cómico ligero que la serie suele regalarnos cada vez que hay demasiada tensión en el ambiente.

De ahora en adelante

Con el asunto de Nezuko zanjado es tiempo de continuar. Tanjiro debe recuperarse de sus heridas (que no fueron pocas) y el resto debe terminar su reunión de Pilares. Sin embargo esto no es todo lo que encierra este ‘cierre’ de ciclo, ya que esto mismo es un inicio a la reflexión de lo que aún está por venir. Por ejemplo la apremiante necesidad de fortalecerse; esto no solo aplica para Tanjiro, quien torpe e inocentemente hizo su gran declaración sobre acabar con Kibutsuji, sino que también aplica para Zenitsu e Inosuke. Este último fue quien sufrió uno de los golpes de realidad mejor acomodados, pero será un buen impulso para que continúe mejorando, pues como ahora ha podido ver que afuera de su montaña hay personas más fuertes que él.

Y aunque Zenitsu consiguió acabar con su enemigo, no salió tan bien librado de su ataque y ahora tendrá un duro proceso de recuperación. Quizá este sea su momento para querer superarse.

Pero nuestro trío dorado no es el único que ve hacia adelante, los pilares hacen lo mismo ahora que la reunión con ‘el patrón’ ha revelado que los demonios están apareciendo con más frecuencia y están atacando con mayor ahínco. Una solución ante esto es el reclutar a mas miembros para los cazadores; solución que no es del todo aceptada por todos, ya que el reclutamiento requiere ciertos estándares para que sean útiles a la organización.

Hablando de futuro, resulta muy complejo el poder ver y comprender que Tanjiro ha llegado a visualizar posibles desenlaces futuros. El más desolador de ellos es pensar que no puede curar a Nezuko, provocando que sus tiempos de vida sean distintos y llegado el momento él tendrá que dejarla sola. Sin duda este es un escenario poco agradable para ambos hermanos.

Comentario final

Kimetsu no Yaiba capítulo veintitrés ha sido un episodio nostálgico, reflexivo y sumamente informativo. No cabe duda que a cada momento esta historia se pone aún mejor, razón por la cual tengo sentimientos encontrados por el inminente final de temporada. Decidí llamarlo así aunque aún no se ha anunciado si habrán más temporadas después de esta. Es posible que uno de los datos que más me llamo la atención es sobre la selección de nuevos reclutas, pues dejan en evidencia que los que más potencial poseen son aquellos que sufrieron una gran perdida por los demonios o aquellos que vienen de una familia de cazadores. Dato a tener en cuenta pues seguramente se verá reflejado en el pasado de los nueve Pilares.

En fin, antes de cerrar con esta reseña tomemos un momento para rememorar los bellos momentos que nos dejó este episodio, como lo fueron: el puchero de Nezuko, los berrinches de Zenitsu y su gran moco colgante, el furioso sonrojo de Tanjiro al hablar en grande y por supuesto, Inosuke manos de bebé deprimido en cama. Grandes momentos, claro que sí.

Finalmente, es tiempo de cerrar con esto, no sin antes preguntar: ¿Qué les ha parecido este episodio? ¿Qué opinión tienen sobre la respuesta de Nezuko? Con lo visto en este episodio ¿Qué opinan de ‘el patrón’? a partir de ahora ¿Qué tipo de superación podremos esperar de nuestro trío dorado?