Se incrementa el acoso en Japón

Un reciente estudio realizado por la Oficina del Gabinete de Japón ha revelado que uno de cada diez jóvenes en Japón ha sido víctima de acoso en el transporte público o en lugares públicos. Este alarmante hallazgo destaca la persistencia de este problema, a pesar de las medidas tomadas por el gobierno para combatirlo. La mayor parte de las víctimas son mujeres, según el informe.

El estudio se llevó a cabo a nivel nacional en febrero, encuestando a más de 36,000 personas de entre 16 y 29 años. Los resultados, publicados este mes, indican que el 10.5% de los encuestados ha sufrido acoso sexual, conocido en Japón como “chikan”. Cerca del 90% de las víctimas son mujeres, y aproximadamente dos tercios de los incidentes ocurrieron en trenes.

Muchos de los encuestados informaron haber sido víctimas en múltiples ocasiones, y algunos incluso señalaron que sufrían acoso casi a diario durante sus años de escuela secundaria. Estos datos reflejan la gravedad y la frecuencia del problema, subrayando la necesidad de medidas más efectivas para proteger a los pasajeros.

Desde principios de este siglo, las grandes ciudades japonesas como Tokio han implementado vagones exclusivos para mujeres como una medida para combatir el acoso. Además, se han instalado cámaras de vigilancia en trenes y estaciones, y se ha fortalecido la presencia de la policía ferroviaria, tanto uniformada como de civil. En las estaciones, carteles advierten sobre el acoso y fomentan la denuncia de estos actos.

A pesar de estas medidas, algunos participantes de la encuesta exigen una respuesta más contundente por parte de las autoridades. Las estadísticas policiales indican que en 2023, alrededor de 2,000 personas fueron arrestadas bajo sospecha de acoso sexual. Sin embargo, la mayoría de los casos no se reportan. Según el estudio, el 80% de las víctimas no informaron a la policía ni a otras autoridades sobre los incidentes. Las razones para no denunciar incluyen no reconocer la gravedad de lo sucedido o considerar que no valía la pena informar a las autoridades.

«Nunca he sido víctima de acoso sexual».
«Quizás sea necesario realizar encuestas periódicas. Yo también he sido víctima de acoso varias veces, pero nunca he presentado una denuncia porque no sabía quién era el culpable o porque tenía prisa por el trabajo o la escuela. Además, no sabía cómo reaccionar ante situaciones ambiguas, como cuando alguien me apretaba la mano o me abrazaba por detrás diciendo que fue un error».
«¿No será una exageración?».
«La Oficina del Gabinete ha tardado mucho en realizar esta encuesta 💦. En los últimos años, también ha aumentado el acoso a niños y hombres».
«Yo también he sido víctima de acoso 😱».
«No entiendo qué placer encuentran en el acoso… Qué asco… Tienen el cerebro podrido».
«¿Tan pocas víctimas?».
«A menudo veo en internet comentarios que defienden los crímenes de manera agresiva, pero nunca he visto que defiendan a los idiotas que acosan. Deben estar realmente mal de la cabeza para hacer algo así».