Más niños en Japón roban a sus padres para gastarlo en gachas

Los informes del Centro Nacional de Asuntos del Consumidor de Japón han arrojado luz sobre una tendencia alarmante: el crecimiento del gasto no autorizado de niños japoneses en juegos en línea. Desde el año 2022, este fenómeno ha ido en aumento, superando las 4,000 quejas, con cargos que alcanzan los 330,000 yenes (más de 2200 dólares) por incidente e incluso ascendiendo a millones de yenes, todo ello sin el consentimiento de los padres.

Los datos recopilados revelan que durante el año pasado, se registraron 4,024 quejas relacionadas con “niños realizando pagos sin permiso”, una gran parte de ellas vinculadas a los videojuegos en línea. Lo preocupante es que esta tendencia continúa en ascenso, ya que solo en lo que va del año 2024, se han recibido 3,100 quejas, un número alarmante que refleja una problemática en aumento.

Este fenómeno no solo preocupa a las autoridades, sino también a los padres y tutores de los niños involucrados. Es por ello que el Centro Nacional de Asuntos del Consumidor de Japón ha emitido una advertencia dirigida a la juventud, instándolos a ser conscientes de sus hábitos de consumo en línea y a no compartir sus contraseñas con terceros.

La adicción a los videojuegos para smartphones, particularmente entre los estudiantes de secundaria y mayores, ha sido identificada como uno de los factores que contribuyen a este problema. Un estudio reciente realizado por NTT Docomo ha confirmado que esta adicción está en aumento, lo que refuerza la necesidad de abordar el problema del gasto no autorizado en línea de manera urgente.

Además del impacto económico en las familias, el gasto no autorizado también plantea preocupaciones en términos de bienestar emocional y psicológico de los niños afectados. Es fundamental que se tomen medidas para proteger a los jóvenes japoneses de los riesgos asociados con el exceso de gasto en juegos en línea, y se espera que las autoridades y los padres trabajen en conjunto para encontrar soluciones efectivas a este desafío en aumento.

«Japón está jugando con fuego. Necesitan clasificar los gacha como juegos de azar (que son ilegales en Japón por cierto)».
«Mira, el problema no es que el gacha no se considere juego, lo es. El problema es que los videojuegos se aprovechan de una laguna en las leyes del juego que los casinos, salones recreativos, concursos, parques temáticos, etc llevan décadas aprovechando. Mientras el dinero real no se utilice directamente para apostar, se considera legal. Por eso los videojuegos hacen que compres su dinero local, y luego usas su dinero local para comprar los objetos».
«Cuando cualquier juego gacha llega a su fin de servicio, todo el dinero que se haya gastado en él no será reembolsado de nuevo al jugador. Personalmente, me sumergí en el mundo de los juegos gacha gastando una pequeña cantidad de dinero en un juego ya cerrado llamado Valkyrie Crusade, un juego anime de batallas de cartas, y no fue una pequeña pérdida cuando terminó. Para mí fue un experimento y una experiencia. Es como apostar, con la diferencia de que las ganancias se van con el juego. Esto va DEFINITIVAMENTE por las ballenas en los juegos mencionados. Por eso no gasto mi dinero en esos juegos gacha, porque esas ballenas habrán malgastado todo su dinero, que podrían haber utilizado para otros fines, como comida, alquiler, electricidad, Internet, almacenamiento de datos y otros elementos esenciales importantes de la vida».
«Esencialmente pagas por una experiencia, no por un producto. Como pagar por ir a la piscina. Si te sobra el dinero y disfrutas de la experiencia, no hay nada malo en ello. El problema son los pobres que toman decisiones financieras que les mantienen en la pobreza. Pero tampoco es mi problema».
«Los niños no deberían tener un smartphone para empezar y los padres responsables no los educarían para jugar a la basura móvil».
«Yo creo que los niños ni siquiera deberían tener teléfonos. La radiación de las llamadas telefónicas es un territorio algo inexplorado, pero ya está claro que es mala para los niños pequeños y los ancianos».
«Pues… hay una cosa que se llama control parental y tal… que si dejas jugar a tus mocosos en tu dispositivo o en el suyo propio, les bloquea para que no compren chorradas. ¡¿Quizás, sólo quizás, deberías activarlo?! Yo no tuve el lujo de crecer con un teléfono inteligente, pero eso no es realmente por qué pienso como lo hago. En mi opinión, si estos niños no entienden cómo funciona el dinero, no hay que dejarles acceder a él sin trabas».
«De hecho, en determinadas circunstancias, los bancos pueden negarse a devolver el dinero retirado fraudulentamente de tu cuenta, aunque tengan al culpable delante de la cámara. Así que me pregunto cuántos de estos padres idiotas están realmente recuperando su dinero de los juegos de móvil».
«Nunca nada es gratis. El free-to-play es una estafa tan normalizada que ya ni siquiera te das cuenta».
«Realmente no hay ninguna razón para los juegos gatcha. Volvamos a los servicios basados en suscripciones de 30 dólares en los que pagas por todo con una simple cuota fija. El resto del juego se deja en manos de los jugadores para que decidan lo que consiguen según cómo jueguen. Ahora sé que alguien se opondrá a esto porque el temor es que los jugadores que no tienen dinero no pueden jugar».