Japón: Despiden a una profesora por vender su pack

El pasado 25 de enero, la Junta de Educación de la Prefectura de Akita en Japón suspendió a una profesora de una escuela secundaria en la ciudad de Daisen por un año y la disciplinó por publicar videos obscenos en un sitio de Internet de pago.

Según la prefectura, la profesora de 39 años que trabaja en una escuela secundaria en la ciudad de Daisen publicó videos obscenos en un sitio de pago cinco veces entre diciembre de 2021 y octubre de 2022. La profesora admitió haber publicado el video sin censura de las partes privadas de ella misma y de un conocido varón, declarando: “El propósito era publicar el video y que fuera visto por la mayor cantidad de personas posible“.

La profesora fue arrestada en noviembre de 2023 por poner a disposición imágenes obscenas para ser vistas por un número no especificado de personas. El 15 de diciembre de 2023, recibió una orden resumida del Tribunal Sumario de Omagari con una multa de 200,000 yenes, y el 25 de enero fue suspendida de su trabajo por un año y se le impuso una acción disciplinaria.

La profesora expresó que “no puede disculparse completamente con sus estudiantes, sus padres o sus colegas” y ha indicado su intención de renunciar. Esta noticia ha llamado la atención y se ha vuelto tendencia, ya que es inusual en Japón que una profesora esté involucrado en la venta de contenido explícito en línea, generando un debate:

«Me imagino la sorpresa que tuvieron los estudiantes cuando se enteraron».
«Bueno, yo no tendría problema con eso, pero supongo que se trata de la imagen de la escuela».
«La pregunta más importante es, ¿cómo rayos encontraron el contenido en línea de la profesora?».
«Lo siento, pero antes de emitir un juicio tengo que ver los videos en cuestión».
«Honestamente no veo el problema con lo que haga de su vida fuera del trabajo».
«Cuando uno piensa en una profesora, uno se imagina a una mujer sensual, pero esta tiene casi 40 años».
«Siempre se dice que “las profesoras son más centradas y responsables”, pero al final de cuentas todos somos humanos».
«Una profesora de 39 años que publica un video pornográfico para que lo vean muchas personas. Me parece más una exhibicionista que una prostituta».
«No entiendo cuál es el problema con todo esto».