Cultura Otaku
En las últimas décadas, el estudio de anime Orange (“BEASTARS”, “Trigun Stampede”) se ha convertido en uno de los principales creadores japoneses en la escena del anime CGI. Según Eiji Inomoto, director jefe y representante de Orange, su equipo tuvo que superar varios obstáculos importantes antes de alcanzar el éxito: el primero y más importante, que el público solía estar mucho menos acostumbrado a la animación CGI.
Orange abrió sus puertas en 2004, un año en el que los estudios recurrían cada vez más al CGI para facilitar la producción de sus animes. Sin embargo, crear un estudio de anime CGI seguía siendo relativamente arriesgado, dado que la mayoría sólo realizaba trabajos por encargo para otros grandes estudios. No obstante, Inomoto creía que había ciertas cosas que su equipo sólo podía conseguir de forma eficaz utilizando el CGI. Durante una reciente entrevista, Inomoto explicó por qué decidió tirar la cautela al viento y empezar a formar un equipo interno para crear producciones originales con animación CGI.
Inomoto comenzó su carrera en la producción de CGI como trabajador independiente en la industria del videojuego. En 1999, empezó a aplicar su talento a la producción de anime. Uno de sus primeros proyectos fue “Zoids”, un anime de ciencia ficción mecha que se convirtió en un gran éxito nacional. También se encargó de la animación de los robots Tachikoma de “Ghost in the Shell: Stand Alone Complex (2002)”. Estas series abrieron la mente de Inomoto a las posibilidades de la animación CG, pero seguía teniendo ciertas reservas a la hora de abrir su propio estudio.
«En la industria del anime por aquel entonces, la demanda de CGI aumentaba desde la perspectiva de compensar partes difíciles de procesar en la animación», afirma Inomoto. «Debido a esta situación tan inestable, las productoras especializadas en animación CGI pudieron seguir generando beneficios. Pero, para ser sincero, yo no sabía si podría seguir produciendo… No sabía si una empresa especializada en CGI podría funcionar como negocio».
En sus inicios, Orange comenzó realizando trabajos de subcontratación para estudios como Satelight (Genesis of Aquarion) y Kinema Citrus (.Hack//Quantam). En 2017, el estudio fue seleccionado como contratista principal para un anime llamado Land of the Lustrous. Esto significaba que Orange se encargaba de casi todos los aspectos importantes de la producción, incluidos el guion, los guiones gráficos y la animación.
Inomoto vio en ello una oportunidad de oro para empezar a utilizar el CGI para cosas a las que el público estaba menos acostumbrado en aquella época. «Hice esta obra con la idea de que quería que los fans del anime aceptaran el CGI, y fue estupendo que este trabajo consiguiera por fin ese objetivo. Hasta entonces, los robots y otros dispositivos habían tenido éxito, pero en Land of the Lustrous, los personajes dibujados con CGI fueron bien recibidos», explicó Inomoto.
Aunque Inomoto intentaba activamente que el CGI fuera más atractiva para el público general, admite que la actitud del público de 2017 influyó en la forma en que diseñó la serie. «Cuando estaba trabajando en Land of the Lustrous, mi objetivo era conseguir una línea que pareciera tanto animación como CGI. El otro día, por casualidad, volví a verlo y pensé: ‘en su momento, pensé que esto era lo mejor’. Pero si ahora tuviera que hacer Land of the Lustrous, no lo haría así. Han pasado siete años, y tanto la tolerancia del público hacia el CGI como mis propios gustos han cambiado, porque las partes del CGI que hacen que la gente se sienta cómoda han cambiado».
Inomoto se dio cuenta de ello poco después del estreno de “Trigun Stampede (2023)”, que rápidamente se hizo con un público entregado. «Creamos Trigun Stampede previendo que habría reacciones negativas como “demasiado movimiento”. De hecho, hubo algunas personas que dijeron eso en los primeros días de la emisión, pero la emisión terminó con una nota mucho mejor de lo que esperaba».
Actualmente, Orange está trabajando en la esperada temporada final de “BEASTARS”. Además, Orange también está desarrollando un nuevo anime inspirado en acontecimientos históricos, que Inomoto describe como un «nuevo reto» para su estudio. Sin embargo, Inomoto afronta el reto con optimismo y grandes esperanzas en el futuro de su equipo. «El próximo objetivo de Orange es hacer un “gran éxito” con CGI completo, así que espero que podamos conseguirlo y que aún más gente acepte las obras CGI».
Fuente: Comic Natalie