En Twitter quieren culpar al anime por el tiroteo reciente en Estados Unidos

El pasado 14 de mayo en Búfalo, Nueva York, se registró un tiroteo en un supermercado que dejó como saldo diez muertos y tres heridos, siendo once de las víctimas personas de color. El tirador se transmitió en vivo a través de Twitch y publicó un manifiesto en donde se describe a sí mismo como un supremacista blanco. Por ello, el ataque es investigado como un acto motivado por el racismo, mientras el sujeto está bajo custodia de las autoridades.

Dejando los hechos de lado, lo que nos reúne hoy es una publicación viral por parte del usuario de Twitter “Illuminated Niggy (@theericklouis)“, quien de alguna manera llegó a la conclusión de que “el anime fomenta el racismo entre los fanáticos” y que “sería interesante ver si el anime fue parte de los motivos que impulsaron la ideología del asesino“. El usuario escribió:

«Creo que es muy interesante que el asesino de Búfalo mencionara su afinidad por los asiáticos orientales específicamente en su manifiesto. Teniendo en cuenta el contexto de su edad y lo activo que era en línea, me hace preguntarme hasta qué punto las subculturas del anime jugaron un papel en su ideología». Y continuó: «En la intersección del anime/manga, los videojuegos y el cosplay existe una violenta tendencia “anti-negros” y no se puede negar que estos espacios atienden en gran medida a los consumidores blancos. Creo que es importante reconocer que estas subculturas son cómplices de la violencia contra los cuerpos negros».

Siguió: «Para muchos consumidores blancos, el anime les permite la ilusión de escapar a un mundo en el que sus “problemas” no existen, a menudo el “problema” es la gente negra. Sea intencionado o no, hay que reconocer el papel que juega. Antes de silenciar este hilo, me gustaría añadir que sí veo anime. No estoy tan involucrado en la cultura como la mayoría, pero de vez en cuando me siento a verlo con mi hermano menor. No estoy pidiendo que se “cancele” el anime. Lo que pido es que si se sintieron ofendidos, cuestionen su racismo».

Por supuesto, su aseveración no pasó desapercibida, y algunas respuestas destacadas incluyen:

«¿Sabes que su manifiesto era solo un copy paste del tirador de Nueva Zelanda de 2019? No sé por qué estás tratando de empujar este ángulo de fetiche asiático. Consumir cualquier medio de comunicación no te convierte en un asesino, el tipo ya no estaba del todo ahí y solo entró en una espiral de locura».
«También me hace pensar sobre sus hábitos gaming y como podrían haber influido».
«Lo que el anime es para los hombres blancos, lo es tambièn el K-Pop para las mujeres blancas si hablamos de “escapismo”».
«No nos desviemos del hecho de que el razonamiento dominante detrás de las acciones horrendas es la teoría de la conspiración del Gran Reemplazo que se puede encontrar en los medios de comunicación de la derecha, no los medios de entretenimiento. Sí, hay fanatismo entre el fandom del anime, pero estamos llegando un poco aquí en los comentarios».
«¿Por qué tienen que meter el anime en todo?».
«El anime y sus fanáticos son muy reaccionarios».
«Oh, sí, claro…. Es por eso que Japón es reconocido por tener tiroteos cada dos semanas… Ah no, espera.. ¿Qué ese no es Estados Unidos?».
«Un hilo bastante enfermo. Agarrarse a un clavo ardiendo para culpar a la cultura extranjera de la propia incapacidad de Estados Unidos para hacer frente a las condiciones materiales que subyacen a los problemas que conducen al terrorismo blanco en Estados Unidos».
«El anime no tiene la culpa. Es uno más de una larga lista que fetichiza a las mujeres asiáticas y sigue perpetuando el estereotipo de las mujeres asiáticas como “dóciles” y “serviles”. Si supieran lo fuertes e independientes que son en realidad las mujeres asiáticas, cambiarían de opinión…»
«El manifiesto no menciona literalmente el anime en lo más mínimo. Deja de esnifar pegamento y de intentar culpar a una mierda que no tiene nada que ver. Es una maldita falta de respeto tratar de usarlo para impulsar una agenda política».
«¿En serio vamos a empezar a señalar a la comunidad asiática, un grupo que ya es considerado “amarillo” en lugar de “blanco” por mucha gente, a pesar de que el manifiesto pasa más tiempo leyendo como un playback del FBI que hablando de anime?».
«Creo que parte del problema puede ser que el público al que va dirigido el anime, que en su mayoría va desde los niños hasta los adolescentes tardíos, no hay nadie que responsabilice a estas personas que aprenden el racismo y la fetichización de los asiáticos porque el anime es una forma de escapismo para ellos».