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Reseña | Fairy Gone — Capítulo 4
leodan52 2 mayo, 2019
[bloques texto=’¡Alto! Esta reseña sobre Fairy Gone contiene spoilers. Si no has visto el capítulo, te recomendamos hacerlo y después regresar a leer la reseña.’]
Capítulo 4: Impaciente ama de casa y artista egoísta
La cuarta entrega de Fairy Gone comienza con la continuación de la pelea contra Sweetie. Free se encuentra desconcertado debido a la habilidad extraña del hada de su enemiga, que refleja cualquier ataque que recibe. Viendo como su compañero es incapaz de someter a Sweetie, Maria realiza un ataque arrollador que neutraliza el contraataque de su oponente. Este embate deja a Maria debilitada, pero Sweetie es ahora vulnerable a los ataques de Free. Con las manos vacías, la integrante de Gui Carlin se ve obligada a retirarse, no sin antes lanzar una amenaza.
Después de la pelea, Maria se recupera durmiendo en la mansión del erudito Cain, recordando en sueños su pasado con Veronica; sin saberlo, su amiga se encuentra muy cerca. Luego de despertar y recuperar parte de su fuerza, María junto con Free reanudan su misión: llevar el “Tomo de Hada Negro” al ministerio. Después de una charla con los eruditos que pone de mal humor a Maria, salen de la mansión para emprender su regreso. Sin embargo, Gui Carlin no se ha rendido aún, y el segundo asalto comienza, pero ahora Maria cuenta con una ayuda inesperada.
Opinión
Esta cuarta entrega de Fairy Gone ha llegado con muchas sorpresas, o por lo menos para mí. He notado una mejoría en el ritmo y en el desarrollo de la trama con respecto a capítulos anteriores. En esta estrega hemos entrado de lleno al nudo o desarrollo de la historia, dejando ya de lado la introducción; si bien se podría decir lo mismo del capítulo anterior, en mi opinión este aún tenía algunos elementos de introducción. Es bastante grato ver como los capítulos han dejado de tener una conclusión propia, y ha comenzado a tener conexiones claras entre sí. Dejar una batalla inconclusa es un elemento bastante común, pero que logra mantener al espectador con la intriga de lo que sucederá después.
En el aspecto técnico, la calidad no ha cambiado mucho. Como ya he mencionado en reseñas anteriores, la animación es buena. Sencillamente buena. Aunque esta frase puede tomarse como un eufemismo para no decir mediocre, no creo que Fairy Gone se merezca tal calificativo. Un anime puede evaluarse por muchos aspectos, entre los más importantes se encuentra la calidad de animación. Pero evaluar esta calidad solo con la potencia de los ordenadores del estudio y con el tiempo de render empleado, es limitarse demasiado. En mi opinión, la constancia debería tener su importancia, ya que es un aspecto que muchos animes no cumplen. Si Fairy Gone lograra mantener una calidad de animación homogénea en todos sus capítulos, sería algo para reconocer.
Veronica, Ver para los amigos
En esta cuarta entrega regresamos a desarrollar un poco más la relación entre Ver y Maria. Los vistazos del pasado que nos muestra la serie nos revelan como fue la vida de Ver antes del ataque a su aldea, además del posible origen de su ira. Fue una niña amable, lo suficiente para pasar el tiempo con la niña solitaria que todos evitaban. Siempre rodeada de amigos y familia; aquello que Maria deseaba con todo su ser. Pero lo perdió todo. Mejor dicho, se lo arrebataron. Lo único que le quedó fue su amiga Maria, y se vio obligada a separase de ella con tal de que pudiera escapar. Es en esa escena que se puede apreciar en su rostro la ira, que luego dictaría cada uno de sus pasos.
Es en este capítulo que Fairy Gone nos confirma que Ver aún aprecia a Maria, y que está dispuesta a ayudarla cuando lo necesite. Durante estos veinticuatro minutos pudimos ver como Ver vigilaba de lejos a Maria, lo cual le permitió entrar en escena a tiempo para encarar al enemigo de su amiga. Incluso no puedo dejar de lado la escena de la habitación, cuando Maria dormía y Ver estuvo a punto de llamar a la puerta. Esta escena ilustra bastante bien los sentimientos de Ver, considerando que mostrarse en un momento así hubiera sido muy imprudente de su parte. Recordemos que Ver aún es buscada por Dorothea.
El enemigo en turno
Gui Carlin sigue estando en boca de los personajes en esta cuarta entrega de Fairy Gone. Nos presentan a dos integrantes excéntricos de esta mafia, a los que el título del capítulo hace referencia, que se convierten en los oponentes de nuestro dúo de Dorothea. Primero tenemos a Patricia “Patty” Pearl. Esta “soldado hada” con una técnica de combate bastante peculiar, se convierte en la oponente de Free. Sweetie fue la que entró en contacto con Patty; le encargó cumplir su amenaza al par de protagonistas.
Por otro lado tenemos a Jonathan Passpierre. Maria se enfrenta a él y sus punzones. Este es el combate en el que se centra más la trama, mostrando las habilidades de combate de Jonathan al vencer fácilmente a una debilitada Maria. A primera vista es el más excéntrico del par enviado por Gui Carlin, mostrando una personalidad sádica. Al desarmar y herir a Maria, obliga a Ver a entrar en acción como su nueva oponente. La gran insistencia de Gui Carlin en entrar en escena en el papel de antagonista, me lleva creer que su aparición será limitada, como los villanos en turno.
Eruditos freelance
Antes de pasar a las conclusiones, me gustaría mencionar de forma breve un término que me llamó la atención durante el capítulo. Me refiero a los “Eruditos de Hadas Privados”, según la traducción a la cual tengo acceso. Ellos, según se menciona, no tienen una relación directa con el “Ministerio de Hadas”. Es bastante intrigante que en el grupo al cual Ver está asociada, haya por lo menos dos miembros de estos eruditos independientes. Sin bien las acciones de este par ya son bastante extrañas desde el capítulo pasado, que se revele que no están asociados al ministerio aumenta el misterio. Quizás valga la pena considerar esto para futuras referencias.
Conclusiones
Disfruté bastante de esta cuarta entrega de Fairy Gone. De hecho me pareció más corto de lo normal, que es una buena señal, ya que me logró enganchar. A diferencia del capítulo pasado, este no se sintió pesado. Es algo inconveniente que la serie se haya tardado tanto en ofrecer un capitulo tan entretenido como este, ya que a estas alturas probablemente muchos la han dejado de ver.
En este capítulo lo que más abundan son los detalles. Pequeñas revelaciones de información que podrían tener diversas interpretaciones, que cobrarán sentido conforme avanzan los capítulos. En esta reseña me centré en lo más relevante, ya que si hablaba de todos los detalles que pude observar, quizás me extendería demasiado. A ustedes, lectores, les toca comentar sobre aquello que no mencioné, o aquello que no pude ver. En fin, ¿qué les pareció el capítulo?
