Reseña | Grand Blue – Capítulo Final

[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Grand Blue capítulo final contiene spoilers. Si aún no has visto el capítulo, te recomiendo que vayas a checarlo y después regreses a leer la reseña.’]

Otori

Un nuevo día inicia para el PAB, todos han llegado a Miyakojima, listos para un día de buceo. Debido al resfriado, y la fiesta que tuvo con Azusa, Iori no consiguió su licencia por lo que será el único que no podrá acompañarlos en la inmersión de 17 metros. Chisa cree que Iori está decaído por no poder acompañarlos, y tener que participar en las pruebas de buceo solamente. Pero cuando se acerca a hablar con él descubre que solo esta mareado. Iori le asegura que las circunstancias no harán que odie el buceo, al contrario lo animan a querer regresar. De vuelta en tierra firme, es momento del esperado Otori, beber hasta más no poder. Pese a sus esfuerzos, Iori y Kouhei, una vez más caen en las garras de los senpais y el alcohol. Pero no son los únicos, incidentalmente Cakey también entra en el desastre.

Al final Iori y Kouhei reflexionan acerca de su decisión de entrar al club de buceo. Y sea como sea, su estancia ha sido toda una experiencia. Durante el regreso a casa, Chisa observa las fotografías del viaje. De principio parecen muy discordantes, pero eso es lo que hace al PAB tan especial.

Siempre habrá un mañana

Parece ineludible, siempre habrá un momento en el que nos sentiremos fuera de lugar. En esta ocasión Iori es quien juega este rol, las circunstancias hicieron que no obtuviera su licencia, ergo, no podía bucear con el resto. Naturalmente uno se sentiría fuera de lugar ante esta situación. Por lo menos eso es lo que parece pensar Chisa. Desde el principio la vemos preocupada por dejar atrás a Iori, después de todo para ella es muy importante que todos disfruten del buceo. Saber que Iori no podrá participar en la inmersión, la lleva a suponer que esto desalentaría el amor por el buceo que comenzaba a aflorar en Iori. Sus preocupaciones solo van para más cuando lo ve suspirar. Es por ello que se acerca a él y trata de “arreglar” un poco la situación. Pero para su sorpresa, Iori no está decaído solo esta mareado.

Eso seguro consigue enfadar, pero también aliviar, a Chisa. Aunque lo que de verdad consigue aliviarla por completo es escuchar a Iori. Él le asegura que se siente mal por no poder bucear con el resto, sin embargo eso no le resta diversión a su viaje. Claro que deseaba bucear, pero viajar en bote, platicar con todos, disfrutar de la comida, todo eso por si solo ya conseguía ser lo bastante bueno. Y lo que es aún más, este no sería el único viaje que haría. Iori tiene confianza en que habrá más viajes esperándole, y para entonces ya tendrá su licencia, entonces podrá sumergirse en el azul profundo con todos. Para él es un hecho que nada ha acabado, sino que apena está iniciando. Este panorama llena de optimismo también a Chisa. El amor por el buceo no estuvo nunca en crisis, Iori es demasiado optimista para ello.

Alcohol al 96%

Obviamente no podíamos despedirnos de este anime sin una fuerte cantidad de alcohol de por medio. Y créanme no hay nada mejor que el Otori para emborracharse y cambiarse el nombre. ¿No me creen? Bueno pues pregúntenselo a Aina. La pobre cayó rendida con un solo vaso diluido del alcohol del Otori, fue tan fuerte el golpe que se cambió el nombre y se puso: LOCA. Dicen que el alcohol puede alterar por completo la personalidad de las personas. Ahora lo creo, solo miren a la pobre Cakey. Paso de ser la puritana: “no se desnuden mientras beban”, a la incontrolable: “si te vas a desnudar, te quitas todo, mejor aún, yo te lo quito”. Es casi seguro asumir que Iori y Kouhei quedaran algo traumados por esta nueva cara de Cakey. Pero dejando a Cakey a un lado, ¿en serio Azusa se iba a tomar esa cantidad de alcohol?

Parece que uno de los requisitos para ser miembro del PAB, es tener una fuerte resistencia al alcohol. Después de todo una de las principales razones, sino es que la principal razón, para ir a Okinawa era el Otori. Afortunada, o desafortunadamente, no pudieron participar en el clásico pero eso no les impidió montar el propio. Como ciertamente es difícil elegir una bebida que a todos les guste, la única opción era: una bebida que todos odien. Un trato justo, desde luego. Me parece que un grupo de senpais como los del PAB serían muy permisivos. Y de hecho lo son, a pesar de que, descuidadamente, Iori golpeara a un senpai y lo hiciera sangrar, este no se enfadó y lo perdono enseguida. Un acto muy noble, pero ojo, no significa que todo esté permitido. Un claro ejemplo, con el alcohol nadie se mete. Menos de 96% no está permitido.

¿Al final qué nos dejó Grand Blue?

Llego mi momento menos favorito, el final. Pero bueno, todo principio tiene un final, y el de esta serie ya nos ha alcanzado. Tras doce semanas velando por este anime, es difícil ser objetiva, pero haré mi mejor intento. Lo primero que debo decir es: quiero una segunda temporada. Vamos claros, el argumento no es nada del otro mundo, de hecho es bastante simplón. ¿Eso afecta a la serie? No, de hecho parece jugarle a favor. No hay pretensión en esta serie, en ningún momento intenta venderte un argumento complicado. Le gusta ser sencillo, se regocija en ello. Pero el verdadero punto a favor que esta serie tiene, es su sentido del humor. ¿Cómo? ¿En una comedia? No me digas. Lo sé es redundante y parece obvio, sin embargo tienen que tener en cuenta algo: no es cualquier sentido del humor. Hablamos de un humor más occidental que oriental.

Así que, sí, el humor es uno que vale la pena ver. Sumado a ello tenemos un inaguantable carisma por parte de sus protagonistas. Los chicos de PAB son una fuente inagotable de diversión y buena vibra. Entonces, ¿los personajes valen la pena? Desde luego que sí, son carismáticos y acaban enamorando (sobre todo Azusa). Pero no todo es bueno, como siempre hay un negrito en el arroz. En este caso, ese negrito, no es otra cosa que el ritmo. La serie suele jugar con un ritmo mal acompasado, es casi como si no supiera saltar de la comedia a la seriedad y viceversa. Hay momentos entre esos saltos que se sienten extremadamente forzados. Ese es para mí, el peor punto de esta serie, y es triste porque es algo que no se ve en el manga. Esos pequeños saltitos le jugaron en contra al anime.

Comentario final

El inminente final nos ha alcanzado, y yo estoy fascinada. La serie ha sido un gran deleite y un gran desestresante para cada semana. Al final lo que más feliz me ha hecho es que llegamos hasta el arco de Okinawa, y créanme sí que lo disfrute. Bueno, no solo el arco de Okinawa, de hecho disfrute de toda la serie. En fin, es momento de despedirla y como siempre, o más bien como mi costumbre me dicta, es tiempo de otorgar una nota final. Entonces, redoble de tambores por favor (agradecería que utilicen su imaginación para esto). La nota final para Grand Blue será: 90/100.

Como dije antes, ningún anime ha llegado a los 100 puntos conmigo, y nuevamente este no fue la excepción. Pero miren que esta vez se acercó bastante. Y en buena parte fue por la nota de puntuación personal que le otorgue. Grand Bue es un anime de comedia como ningún otro, el humor que nos ofrece es fresco y diferente. Los personajes son agradables y llenos de carisma, pero sobre todo son bastante únicos. Claro que tiene sus defectos pero no es algo que haga que te des la vuelta.

En fin, este es el final y toca decir adiós. Yo por mi parte sé que voy a extrañar a mis chicos alcohólicos y sus ocurrencias que alegraban mis viernes. Ahora lo dejó en sus manos. ¿Están de acuerdo con la nota final? ¿Qué nota le pondrían ustedes? ¿Al final les ha llegado la increíble necesidad de experimentar algo nuevo? A mí, la verdad que sí. Salgan de su rutina, atrévanse, nunca se sabe, quizá nuestro PAB está más cerca de lo que creemos.