Reseñas
¡Atención! Esta reseña contiene spoilers del tercer y quinto capítulo de Tokyo Ghoul: re. Te recomendamos ver el episodio antes de continuar tu lectura.
Capítulo 3: La víspera
Al comienzo del capítulo, un empleado le entrega al señorito Shu la ropa interior de Kaneki, la cual le trae recuerdos del mismo. El empleado dice que tiene que ayudar a su amo.
Urie ha terminado su operación que se hizo en el capítulo anterior sin notar aún ningún cambio. Recapitulan lo que ocurrió en el despacho de la persona encargada de firmar el permiso.
En la casa del escuadrón Quinx, Ginshi se encuentra a Urie descansando. Por otro lado, Toru observa como Saiko se esconde en su cuarto. Los chicos intentan hablar con ella porque tienen la tarea de atrapar al ghoul llamado Nutcracker del episodio anterior.
Terminan entrando en la habitación con sus kagunes. La chica no quiere participar en misiones y Urie termina convenciéndola afirmando que pueden llegar a despedirla.
Al día siguiente, en la reunión relacionada con Nutcracker varias personas llegan tarde. Por la puerta entra, Juuzo Suzuya, inspector que ya conocemos con anterioridad. Ginshi llega corriendo con Saiko en la espalda. Creen que hay implicada otra ghoul llamada Big Madame.
Urie se separa del grupo. Haise va a ver de nuevo Donato para que continúe ayudándole, pero él lo que hace es hablarle acerca de sus recuerdos.
La operación
Ya en casa, Haise les cuenta el plan para actuar. La chica fotógrafa se cita con el empleado del comienzo del capítulo y, le entrega la ropa interior de Haise diciéndole que se deshaga de ella. Con los recuerdos que nos muestran de ella, se sacan como conclusión que es una antigua amiga del ghoul gourmet.
El escuadrón Quinx aparece vestido entero de mujer en una discoteca ya que pretenden llamar la atención de la ghoul. Las “chicas” hacen lo que sea para llamar su atención, pero termina haciéndolo Haise simplemente por ser él. Toru bebe más de la cuenta y hace que pierdan a su objetivo, aunque antes consigue la dirección de la subasta.
Haise y Juuzo hablan con el que parece un alto cargo de la CCG para informarles acerca de la subasta de humanos que realizarán los ghoul. Al inicio solo iba a ir Toru, pero Juuzo decide ir el también.
En la terraza de un edificio, Ayato es seleccionado junto con su equipo para ser los guardaespaldas de Big Madame en la siguiente subasta.
De mientras va llegando el día de la subasta, el escuadrón entrena, aunque sin Urie, Juuzo visita a alguien en el hospital. Cuando llega el día, todo el mundo está en su puesto, ya sean ghouls o los Quinx.
Conclusión
En este episodio, se va aclarando más la situación y entendiendo donde han terminado los personajes de la anterior temporada.
Haise y su equipo ya tienen la localización de una ghoul que se dedica a las subastas. Ya podemos dar por hecho que Juuzo y Toru van a ser parte de la misma, aunque solo es una trampa para poder capturarlas. Igualmente, con Ayato, su equipo y unos cuantos ghouls fuertes más, va a estar muy reñido.
Saiko por fin ha salido de la que parecía su cueva, o sea, su cuarto. Ahora le queda entrenar un montón por haber estado sin hacer nada durante un montón de tiempo.
Capítulo 4: Subasta
Toru se encuentra encima del escenario de la subasta siendo observado por todos los ghouls allí presentes. El chico recuerda lo sucedido cuando se montó en el coche de la ghoul y es que fueron intoxicados con algún tipo de gas que los durmió. Se encuentra dentro de un cajón de carga gigante.
En el escenario de la subasta, dos payasos hacen reír al público hasta que cae un decorado. En ese momento es cuando aparece los payasos como los subastadores. Van apareciendo los diferentes humanos que están en puja. Vemos una pelea de pujas entre dos ghouls, Big Madame y Croque Monsieur. Los guardaespaldas hablan entre sí de los precios.
El siguiente en puja es Toru. Los que tienen más dinero y el ghoul que estuvo a punto de matarlo quieren hacerse con él tras revelar el presentador que es un cíclope. Acaban vendiéndolo por 200 millones.
Después de él, sale Juuzo. Intenta deshacerse del presentador y lo consigue. Luego mata a una docena o más de ghouls. Fuera del recinto, están todos los de la CCG esperando.
Comienza la cacería
Tras dar la orden y las indicaciones, cada uno se dirige a por su rival en la redada de ghouls. Los ghouls intentan deshacerse de los CCG. Ayato se enfrenta a Juuzo ya que quiere defender a Big Madame. De mientras, Haise y demás se enfrentan a otros ghouls, aunque son enviados a continuar.
Toru escapa con Nutcracker y se esconde. El empleado del ghoul gourmet lo encuentra. Por otro lado, Miza y Naki pelean contra la CCG, sacándoles gran ventaja. La inspectora Mado los detiene un poco y se empiezan a pelear también.
En otro punto del recinto, otros inspectores tratan de acabar con más ghouls. Uno es atravesado por la ghoul payaso del espectáculo por pensar que era humana. Aparece el otro presentador alto al que parecía estar muerto.
Hinami dirige la operación, reagrupando a los grupos. El empleado del chef gourmet prueba la sangre de Toru, pero llega el ghoul que intentó matarlo en su momento en el coche, Torso. Ambos se pelean y Toru escapa, aunque ha ganado el empleado la pelea contra Torso.
En una sala remota del recinto, Eto habla con Tatara y mandan al campo de batalla a Owl. Los demás inspectores luchan como pueden. Owl llega a matar a los inspectores más débiles, arrancándoles el corazón.
Conclusión
En este episodio, la subasta acaba siendo un completo desastre. Acaba desencadenando una pelea entre la CCG y los ghouls que estaban para proteger a los de la élite. Por el lado de la CCG, hay inspectores muy fuertes, pero, aun así, acaban muriendo unos cuantos. Por otro lado, los ghouls son robustos, pero también acaban falleciendo los más débiles.
Toru consigue escapar, aunque ya hemos visto que hay dos ghouls que ansían acabar con su vida a toda costa. La inspectora Mado seguramente acabe peleando contra Hinami ya que el quinque que utiliza es el kagune de uno de sus padres. Por otro lado, Haise seguramente acabe luchando contra Ayato y, quizás, eso fuerce algunos recuerdos de su pasado.
Al final del capítulo, los miembros del Aogiri, hacen gala de otro ghoul que parece hambriento y sediento de matar miembros de la CCG. Se hace llamar Owl, aunque es Takizawa, que es el antiguo compañero de Amon y se le había dado por muerto.