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Reseña | Hoshiai no Sora – Capítulos 2 y 3
Noboru Taiyo 7 noviembre, 2019
[bloques texto=’¡Advertencia! Esta reseña sobre Hoshiai no Sora capítulos dos y tres contiene spoilers. Si aún no has visto los episodios, te recomiendo que vayas a checarlos y después regreses a leer la reseña.’]
Hoshiai no Sora dos
Katsuragi por fin decide ser parte del club de soft tenis, después de todo puede que valga la pena por el pago que recibirá. El equipo se muestra escéptico respecto a las habilidades de Maki, y es que en realidad todos ahí son demasiado engreídos. ¿Puede que estos roces puedan servirle al club de los chicos? La decisión de un manager y correr veinte vueltas alrededor de la cancha de tenis marcan un gran inicio para Katsuragi en el equipo.
En definitiva, un nuevo miembro al club pone las cosas tensas en un grupo de hombres competitivos. Los chicos pasan toda la práctica intentando explicarle a Maki las cosas más básicas del soft tenis, con muy buenas intenciones quizá. Maki muestra todas sus intenciones para hacer que el equipo funcione siendo sincero respecto al pésimo rendimiento del club, ¿podrán los ocho chicos soportar la verdad?
Hoshiai no Sora tres
Es hora de que Maki demuestre que tiene habilidades extraordinarias. Los partidos contra cada pareja del club sólo hicieron evidente que, en efecto, Maki es una excelente miembro y que podría hacer que lleguen a las nacionales, pero también demostró que el club es un completo fiasco. La amistad que comienza a surgir entre Shinjo y Katsuragi parece estar ligada a los problemas que cada uno vive y que sin saberlo no son tan diferentes. Shinjo está realmente comprometido con Maki, ayuda a sus deberes y pasan tiempo juntos, volviéndose más cercanos con todo y los roces que puedan tener.
Corramos unas cuantas vueltas…
Toda la trama de de Hoshiai no Sora toma al soft tenis como pretexto para hablar de las inseguridades de los personajes principales y los conflictos de los secundarios. Por un lado, después de que Maki se viera acorralado por Shinjo, logra identificar los problemas del equipo y los humilla a todos corriendo a la par del capitán del club veinte vueltas. En definitiva, los ocho chicos no esperaban que un primerizo sin experiencia en algún deporte tuviera algún tipo de condición física para tal hazaña. Detrás de toda esa seguridad inspiradora y personalidad misteriosa, Maki esconde su verdadero dolor.
Katsuragi refleja perfectamente la carga tan abrumadora de la vida en todo su esplendor. Cada quien nace sin pedirlo y adquiere responsabilidades que en definitiva quisiera evitar, para Maki cuidar de sí no es una opción, es un deber. Su madre en realidad es un ente alejado de la realidad de su hijo incapaz de identificar el daño que Katsuragi tiene acumulado por las multiples tareas que hace como responsable de sí, de su casa y también de ella. Si algo me tiene atrapada y encantada con la serie hasta ahora es la forma sutil en que aborda el drama de la vida.
Ganen si pueden…
La maravillosa idea de jugar unos cuantos partidos con el equipo que a Maki se le ocurrió terminó por herir el ego de los demás. En definitiva que alguien a quien subestimamos nos demuestre lo mediocre que somos no es algo que nos venga mucho en gracia. Siguiendo la línea del drama de la vida, vemos al club totalmente desmembrado, desequilibrado y sobretodo confiado, todo esto no es más que el resultado de diferentes personalidades bien planteadas con un drama propio. La búsqueda de una personalidad que esconda todos esos huecos existenciales se hace evidente con la actitud de cada miembro.
La humillación pública nos demuestra los infantiles e inmaduros que somos cuando se trata de negar nuestra condición de víctimas. No creo equivocarme al decir que aunque la trama es algo predecible hay en ella un reflejo, que aunque es evidente, de lo que significa crecer. Vale totalmente la pena seguir la serie, no sólo por el drama sino para averiguar si el club de Soft Tenis masculino llegará a las nacionales, jaja…
Conclusión…
Cerremos esto de una vez por todas, Hoshiai no Sora vale la pena para cuestionarse respecto el peso de la vida y sus responsabilidades pero además bien vale la pena examinar los problemas individuales de los personajes y el modo en que resuelven cargar con ello. Aunque predecible, bastante entretenida, al menos para una amante del drama.
