Reseña | Dr. Stone – Capítulo 2

[bloques texto=’Esta reseña sobre Dr. Stone contiene spoilers. Si no has visto el capítulo, te recomendamos hacerlo y después regresar a leer la reseña.’]

Capítulo 2 : “Rey del mundo de piedra”

En este segundo capítulo de Dr. Stone, Senku deja la decisión de a quién despertar a Taiju, y, sin dudarlo, este decide que sea Yuzuriha. Sin embargo, justo cuando la van a despetrificar aparecen unos leones que comienzan a perseguirlos. Desesperados, dan con la estatua de un joven famoso por su fuerza y deciden rociarle el ácido. El joven, Tsukasa Shishio, mata a uno de los leones con un solo golpe y consigue ahuyentar al resto.

A partir de ese momento, Tsukasa colabora con Senku y Taiju aportando la fuerza para la caza. Esta situación ideal no dura demasiado, pues las ideas de Senku sobre la civilización y la tecnología acaban chocando con los propios planes de Tsukasa. En la playa, recolectando conchas para conseguir carbonato de calcio, este mata a un hombre petrificado y revela sus propios planes: quiere despertar solamente a los jóvenes y preservar así el mundo natural que les rodea. Senku se niega.

Análisis: Civilización versus Naturaleza

En esta nueva entrega de Dr. Stone, los acontecimientos han dado un giro inesperado que ha llevado al despertar de Tsukasa Shishio. Su intromisión en la historia estaba ya anunciada desde el momento en el que Taiju lo reconoce en el capítulo anterior. Ha sido, además, un episodio más de cimentación de la trama base de esta magnífica historia. Así, si en la primera entrega nos presentaron la petrificación de la humanidad y quedaron claros los objetivos de Taiju y Senku, nos introducen ahora a la némesis del protagonista.

El desarrollo de la historia nos presenta la aparición del nuevo personaje como una oportunidad ideal para la supervivencia en ese mundo de piedra. El mismo Tsukasa sorprende por rápida aceptación del papel que le corresponde. Inteligencia, resistencia y fuerza, los tres personajes presentan un equilibrio de poderes perfecto. Sin embargo, el fin de dicho equilibrio está vaticinado desde el principio, ya sea por el escepticismo de Senku o por los ojos de Tsukasa, perdidos en pensamientos mientras todos duermen.

Lo realmente resaltable de este segundo capítulo de Dr. Stone es la creación de un enemigo tan formidable. La raíz de las ideas de Senku y las de Tsukasa tienen ambas un sentido ético muy potente, por lo que nos es imposible caer en el maniqueísmo. Considero especialmente necesario- siendo los obstáculos y enemigos algo fundamental para toda historia- un trabajo intenso y razonable en ellos. En este sentido, estoy muy satisfecha. Tengo el pleno convencimiento de que uno de los puntos más fuertes de la serie es, precisamente, el sustento de un enemigo coherente, extraordinario y a la altura del protagonista.

En cuanto a la confrontación ideológica, los mismos espectadores nos vamos a dividir en opiniones diversas y van a ser muy interesantes. ¿Bando de la civilización o bando de la naturaleza? La autora de estas líneas está absolutamente a favor de Senku. Prometo en siguientes reseñas un razonamiento pormenorizado.

Tsukasa Shishio, el primate más fuerte

La animación que se ha hecho de este personaje es impecable. La voz, la caracterización y el movimiento han sabido hacerle honor a su fuente en el manga. Tsukasa no es un personaje que ideológicamente me agrade, pero como amante de las buenas historias, estoy encantada. Estamos ante un enemigo muy bien desarrollado. La profundización de sus traumas y la huella que le han dejado, su capacidad para estar alerta y dialogar consigo mismo en silencio, su fuerza anómala junto a una inteligencia que rompe el cliché del bruto sin capacidad mental, etc., dan forma a un personaje muy atractivo.

Como intuición propia, interpreto la personalidad de Tsukasa Shishio en dos niveles. En el más superficial, se nos transmite la imagen de un Adán salvaje y puro. Es el hombre dominante en la nueva Edad de Piedra, el cazador de corazón noble que respeta la Naturaleza que le rodea. Además, el cuidado estético del personaje engarza a la perfección con esta actitud, y enseguida nos retrotrae a Avatar y otras historias con el mito del buen salvaje. Hay un segundo nivel, no obstante, que va tomando forma desde la óptica racional de Senku y la del mismo lector del manga. No voy a adelantar este análisis profundo, aunque se intuye desde el principio.

Por otro lado, debemos insistir, ante todo, que esta historia apuesta por el desarrollo de personajes extraordinarios, con habilidades y una forma de ser que están por encima de la media de cualquier ser humano. Tsukasa Shishio, evidentemente, está en esta liga de lo extraordinario. No nos puede extrañar que mate a un león y se haga con la situación en pocos minutos tras 3700 años sumido en la piedra.

Senku, el científico y el joven

Poco a poco, se van desarrollando más el carácter y las habilidades de Senku en este segundo capítulo de Dr. Stone. Y si su capacidad intelectual y su determinación de florecer una nueva civilización nos contagia la misma admiración que siente Tsukasa por él, yo quiero destacar ese valor humano que esconde bajo esa ironía risueña y el distanciamiento emocional que suele mostrar.

Senku quiere salvar a toda la humanidad y tiene un concepto humilde de sí mismo. Sabe que es capaz de lograr semejante hazaña, pero se valora como un joven al que, en sus propias palabras, “le gusta Doraemon”. Esto es lo mismo que decir que no es un tirano, no es un megalómano dispuesto a abusar de sus propias aptitudes y, básicamente, tiene los pies en la Tierra. También atesora a sus amigos, y así, no está dispuesto a dejar que Taiju sea el sacrificio de los leones. Para ello, no usa, de hecho, argumentos emocionales, sino lógicos y basados en la supervivencia; y, con todo, se intuye el trasfondo sentimental.

También sale a relucir la enorme inteligencia social de Senku en este episodio. Es un genio en casi todos los sentidos, y por ello capta enseguida las verdaderas intenciones de Tsukasa.

Respecto a su función como científico, tiene la capacidad de transmitirnos su pasión. El trasfondo educativo respecto a los procesos científicos y los avances de la humanidad queda superado en esta obra gracias a la actitud de su protagonista, que va más allá. Y es que, Senku ama la ciencia y la convierte en algo lúdico, “emocionante“. El conocimiento que se transmite por medio del entusiasmo siempre superará a la capacidad de divulgación de lo meramente académico. Sin restarle importancia a esto último, la gran habilidad de Senku es que nos contagia y nos hace disfrutar con él.

A modo de conclusión

Otros detalles que quisiera destacar de este segundo capítulo de Dr. Stone son la banda sonora y la animación, que mejoran por momentos. Veo, además, resueltos los fallos técnicos que se produjeron en algunas escenas del primer capítulo y la música es cada vez más atractiva para mi gusto.