Japón
No es un secreto que Japón ama a los gatos. Este es, después de todo, el país que tiene camas para gato de crepé, e incluso sudaderas con gorros de orejas de gato.
Pero, ¿por qué Japón tiene una debilidad por los gatos? Esa es la pregunta que el portal de internet Joshi Spa le hizo al experto en psicología Hiragi, quien analizó los comentarios de numerosos dueños de gatos para descubrir qué hace que los felinos sean tan atractivos para los japoneses.
Los resultados
Obviamente, su ternura es un factor importante, ya que Hiragi identifica su suave pelaje, sus maullidos y sus tiernas patas entre sus puntos más encantadores. Pero la investigación también arrojó otra conclusión: los japoneses aman a los gatos porque son tsundere.
Para aquellos no familiarizados con el término, tsundere es una mezcla entre las palabras tsuntsun (distante y cortante) y deredere (dulce y cariñoso). Es una personalidad que describe a alguien que cambia entre emocionarse al estar junto a ti y no querer nada que ver contigo de manera recurrente, en función de sus estado de ánimo actual y las circunstancias.
Las tsundere han sido, desde hace algún tiempo, el arquetipo de personajes más popular en los animes de comedia romántica. Sin embargo, la descripción también se adapta a los gatos, quienes no tienen reparo en rechazar tus intentos de jugar con ellos, hasta el momento en que te rindes y los dejas en paz; para posteriormente ellos mismos acercarse y exigir una sesión inmediata de caricias y mimos, ronroneando con tanta alegría que te preguntas el por qué no aceptaron tu invitación desde el principio.
No obstante, Hiragi no cree que los japoneses amen a sus gatitos tsundere debido a algún tipo de atracción por sus fetiches de anime. Por el contrario, cree que la afinidad con sus mascotas proviene de un valor como sociedad. “Estadísticamente hay muchas personas en Japón que a menudo piensan en lo que podrían hacer para ayudar a alguien más“, comienza explicando Hiragi.
“Existe una fuerte tradición entre los japoneses en su conducta que los lleva a pensar en los demás antes que en ellos mismos. Entonces, incluso en sus relaciones con sus mascotas, incluso si su mascota no es particularmente obediente, muchos japoneses están felices de poner las necesidades de su gato antes que las suyas, y actuar en consecuencia“, continuó Hiragi, concluyendo que para muchos dueños de mascotas japoneses, estar al servicio de su gato es mucho más gratificante desde el punto de vista emocional que hacer que obedezca sus órdenes.
Fuente: SoraNews24