Japón
Studio Ghibli es reconocido por sus películas animadas de fantasía fabulosamente animadas y conmovedoras, pero al timón del aclamado estudio de animación hay un hombre con un comportamiento famoso y severo: el director y cofundador Hayao Miyazaki.
A lo largo de los años, el franco Miyazaki ha alborotado a la comunidad del anime con algunos sorprendentes comentarios, como cuando dijo que el problema de la industria del anime son los propios fanáticos y revelando el tipo de otaku que más detesta.
Sin embargo, las entrevistas con el legendario director de anime son bastante raras, por lo que a veces las cosas que dijo hace años vuelven a resonar para sorprender a una nueva generación de fanáticos. Eso es lo que sucedió esta semana en Japón, cuando resurgió un artículo detallando la opinión de Miyazaki sobre las actrices de voz en Japón.
En la entrevista, concedida al portal The Guardian en el año 2005 antes del estreno de la película Howl no Ugoku Shiro (Howl’s Moving Castle) en el Reino Unido, Hayao Miyazaki comentaba sobre los actores de voz extranjeros elegidos para el doblaje de la película. Cuando la discusión se centró en Lauren Bacall, quien interpretó a la Bruja del Páramo en el doblaje inglés, Miyazaki habló con aprobación y la describió como “una mujer fabulosa”, para luego añadir:
“Todas las actrices de voz en Japón tienen voces que son muy coquetas y que buscan la aprobación masculina, nosotros no queremos nada de eso“.
Fiel a su estilo, Miyazaki sabe cómo tirar bombas sobre la industria del anime como nadie más. Sin embargo, en esta situación, la gran mayoría de los japoneses que escucharon su primera vez recientemente, 15 años después, tendieron a estar de acuerdo con él, destacando comentarios como:
- “Lo entiendo totalmente, las voces coquetas de los personajes femeninos en un anime nocturno me hicieron sentir tan incómodo que dejé de verlos“.
- “He opinado lo mismo por muchos años“.
- “Todos los personajes femeninos tienen siempre la misma voz, que aburrido“.
- “No puedo soportarlo, es como si produjeran actrices de voz en masa con el mismo tono de voz“.
- “Las voces no son naturales, pero, lamentablemente, el espectador ya ha sido acostumbrado a eso“.
- “La actuación de voz es demasiado exagerada siempre. Es ridículo pensar que las chicas hablan así todo el tiempo“.
Como uno de los amigos y confidentes más cercanos de Hayao Miyazaki, el cofundador y productor de Studio Ghibli, Toshio Suzuki, es una de las pocas personas en el mundo capaz de enfrentar a Miyazaki cuando se trata de decisiones creativas. En los años 90, por ejemplo, Suzuki convenció a Miyazaki de que dejara en pausa su proyecto favorito Kemushi no Boro (Boro the Caterpillar) a favor de Mononoke Hime (Princess Mononoke), que resultó ser una de las películas más populares del estudio hasta la fecha.
Sin embargo, eso no quiere decir que Suzuki tenga el control total sobre las obras de Miyazaki, ya que cualquier decisión sobre el reparto será sin duda resultado de discusiones colaborativas. Entonces, si Miyazaki tiene aversión hacia las coquetas actrices de voz de Japón, ¿quién interpretó el papel original de la Bruja del Páramo en Howl’s Moving Castle?
La respuesta es el cantante, actor y activista social japonés, Akihiro Maruyama, mejor conocido por el nombre artístico de Akihiro Miwa. Miwa es abiertamente gay y un reconocido drag queen en Japón, quien comenzó como un cantante de cabaré a los 17 años, y quien ya era un reconocido artista desde antes de trabajar para Studio Ghibli por primera vez, en el papel del lobo gigante Moro en Mononoke Hime.
De hecho, al mirar hacia atrás en las películas de Studio Ghibli (e incluso en las de Makoto Shinkai) se puede observar una tendencia a usar actores y cantantes en lugar de actores de voz de anime japoneses, que parecen satisfacer los deseos creativos del director Miyazaki, así como las necesidades promocionales de Suzuki como productor. Sin embargo, todos pueden estar de acuerdo en que el tono de la voz de cualquier personaje influye en la historia, y las voces chillonas de las actrices de voz actuales en la industria no se adaptarían para nada en una película de Studio Ghibli.
Son estos pequeños detalles los que son una gran parte de lo que hace que las películas de Studio Ghibli sean tan particulares y aclamadas, e incluso se han dado el gusto de utilizar en su elenco de voces a personas que ni siquiera eran actores de nada.
Fuente: The Guardian